Viviendo con mi profesor

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Sentí como una mano me abrazaba dulcemente haciendo que girará mí cuerpo y ver quien era pero...era mi profesor durmiendo placidamente y saliendo de su boca un charco de saliva, yo abrí los ojos completamente para alejarme rápidamente de él sintiendo como mis mejillas ardían por lo cerca que estuve, casi tocaba sus labios. Me quite de la cama y fui al baño a ducharme y lavarme los dientes y saliendo para preparar el desayuno.

...

-

-¿Mmm? Hombre ya desperto ¿qué tal estuvo su sueño?-

-Nada mal ya que sentía como es que abrazaba a alguien, como su piel era suave y se acomodaba bien en mis fuertes brazos, como mí nariz chocaba con su cabello que huele a flores...pero luego lo deje de sentir-

-Si sabe de quien esta hablando ¿verdad?-

-Mmm no, ¿por qué?-

-Como te quedarías que esa persona que dijiste era yo- se que do un momento callado y mirandome para despues hablar.

-De nada sirvio que yo pusiera esas almohadas, perdón pero cuando estuve en mí cama no me controle por lo comoda que era y pues me estire por completo-

Suspire con una sonrisa por recordar su cara cuando yo apenas me estaba levantándome -no se preocupe venga a desayunar que ya esta listo-

-Sí, gracias-

Nos sentamos en la mesa y coml siempre nadie hablaba solo veía como él disfrutaba la comida -<<este no come, este traga>>- me recordo mucho aún amigo que yo tengo en la preparatoria. Un rayo hizo que los dos brincaramos de nuestros ha cientos y que la perrita fuera corriendo y ladrando ya que este sono aún más cerca que los anteriores.

-Hay que tener más cuidado si salimos para comprar más comida-

-De eso no hay problema, yo compre demasiafo así que no se preocupe si nos va a durar, total el huracán dura aproximadamente como dos o tres días y no de la noche a la mañana se va acabar toda esta comida-

-Realmente no se sabe ya que el huracán se alimenta del calor y el mar y eso es lo que le da la energía para crecer aún más y durar más tiempo-

No dije nada y terminamos de comer para que cada quien se fuera a lo suyo. Yo por lo cual me quedé estudiando ya que me pondrían una evaluación para ver que tal estaban mis conocimientos, debo admitir que las clases en casa son mucho mejores que en la escuela ya que aquí no andas con el estúpido uniforme. Estudiaba todo lo que estaba en mis apuntes ya que las evaluaciones que él pone son como si ya te pusieran el verdadero y si estos estaban difíciles el exámen ni se diga.
Comenzo acercarse y me quito la libreta para ponerme las preguntas que me había sacado, se sento al frente de mí para ver como me mato.

-Cejitas pero dime que vas a poner- su mirada estaba en mí poniendo me un poco nervioso pero despues se le ocurre la gran idea de cantar a todo pulmón, me dio risa ver como Beauty salía corriendo y dirigiéndose al cuarto pero este estúpido azoto la mesa haciendo que me asustara y comenzara a escribir las respuestas.

-Listo termine...- agarró la hoja leyendo cada respiesta y calificadolas, unas estaban bien y otras mal así que en total tuve un 76%, no me ayudaba en nada ya que tenía que pasar forzosamente con un 100%.

-Veo que andas mejorando...he decidido ponerte el exámen aún más fácil-

-¡¿Enserio?!-

-Si, ya que antes sacabas un 40% o 30% y eso era realmente algo inutil para mí...pero a cambió de algo-