HISTORIA DE DOS

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Ellos se conocieron por casualidades de la vida. De esas coincidencias que solo deben suceder.

Fue así que comenzó la historia de dos. Él un hombre libre, loco, apasionado, de buen corazón.
Ella una mujer directa, loca, en ocasiones fría pero de buen corazón. Ambos de mundos diferentes,
ambos con diferentes pensamientos, ambos no buscaban amor, menos una relación, ambos creyeron jugar, ambos buscaban coincidir.

Una noche consumaron el esperado encuentro, la atracción fue inmediata al desnudarse hasta el alma, sabían que debían estar juntos, sabían que había una razón de su encuentro, sabían que podrían salvarse y sanarse uno al otro, sabían que podían vencer sus miedos, sabían que lo que les sucedía era raro y extrañamente loco. Se preguntaban constantemente como pudo suceder, no se lo esperaban. La respuesta era la misma, sus risas de complicidad.

Las noches fueron testigo de sus encuentros, ellos siempre apasionados y locos por poseerse,
todo pasaba muy rápido, y fue por esa misma razón que comenzaron a olvidar los tiempos, se olvidaron de abrir el corazón, se olvidaron de conocer uno del otro, para conocer sus verdades, su pasado, sus miedos, sus sueños y poco a poco así se abandonaron.

Ella era fría, él era atento. Él se volvió frío y menos comunicativo, ella ansiaba saber más. Él no se
sentía seguro, ella solo reía. Ella necesitaba soltar su miedo, él no supo ayudarla. Él quería verla,
ella estaba ocupada. Ella quería verlo, él jugaba al interesante. Él se alejaba, ella se acercaba más. Él la quiso pero no en el tiempo que ella lo hizo. Así continuaron sin coincidir tiempos ni
espacios, ironías de la vida dejaron de coincidir. Les interesaba ser buenos amigos, porque ambos
no querían perderse. No eran malos, ninguno quiso dañar al otro. Él quiso ser distante para que ella se alejara, pero ella siempre volvía. Ella se quería alejar sin que él se dé cuenta, él volvía a escribir. Y antes que se desgastara lo poco que ya los unía, ella decidió decir su verdad con una
carta final, él no la volvió a buscar. Ellos temían el adiós pero fue inevitable.
Él por momentos la recuerda, ella juega a olvidar. Ambos se recuerdan. Ambos se recordarán, aunque la historia haya llegado a su final.
Quizás la vida los vuelva a unir o quizás no, pero es seguro que sonreirán al recordar la historia
que fue solo de ellos.
La historia de dos.

Escrito: Deborah M. Lamas Inst: @debitaah

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