MADRE, MI TODO!

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A veces creemos que crecer es hacernos independientes, pero olvidamos que lo má
s sincero y reconfortante para poder ser libres, es solo el hecho de tenerla, ella,
nuestra madre.
Ella que odian verte mal, que quiere verte triunfar, que de niños nos enseñaba
para ser personas de bien, ella que prefiere mil veces que seas feliz, porque ella
solo quiere ver tu sonrisa iluminada. Esas mujeres que trabajaron sin parar para
darnos todo, y aunque a veces fuimos injustos, siempre sabíamos que su esfuerzo
constante era por nosotros, sus hijos. Sus hijos que a veces solemos ser ingratos,
pero que daríamos todo por ellas, porque siempre serán nuestro todo.
Madre es aquella que nunca dejó solo a sus hijos, que luchó por ellos ante toda
adversidad (crueldad de la vida), y que dejó en muchos casos de sentirse mujer
para poder ser la madre ejemplo, aunque ella tan humildemente diga que no lo es.
Para nosotros siempre será perfecta. A quien por suerte le tocó llamar madre y
padre a la misma mujer tuvo la dicha de verla en sus múltiples facetas, no me mal
entiendan todas las madres son maravillosas (claro también hay quienes no deberí
an tener ese título tan grande).
En mi caso, era asombroso ver a mi mamá colgada de una escalera (o la simulación
a una) arreglando una bombilla de luz, o arreglando la casa tipo albañil, o
pintando como toda una profesional en la materia. Así de asombrosa es mi madre
y sé que hay muchas madres igual de ingeniosas y luchadoras, que cuando
obtuvieron un NO por respuesta, para ellas era un nuevo comienzo. Ellas nos
educaron fuertes, en ellas no hubo odio sino mucho amor. Sabíamos con solo
verlas que era lo que queríamos, ayudándonos a planificar nuestros tiempos como
familia, a no perder el tiempo en cosas insignificantes que nos lleven al odio o
vicios. Me tocó ser la hermana mayor y muchos se sentirán identificados pues nos
toca crecer un paso más adelante para ser su soporte pero no porque ella lo exija
sino porque te nace natural. Y quieras o no, eso te prepara para la vida. Los
hermanos menores también siguen los mismos pasos, no les quito el mérito.
Gracias mamá por nunca darte por vencida y enseñarme mucho del amor
maternal y de lo que puedes lograr, estoy MUY ORGULLOSA de ti.
Escrito: Deborah M. Lamas Instagram/twitter: @debitaah

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