Karen ayudo a mateo

5 1 0
                                    

A levantarse, mateo tocia algo de sangre.
-No tenias por que ayudarme.
-no podía dejar que esa chica te faltara el respeto de esa forma.
Te llevare a la enfermería de a escuela.
No, estoy bien no te preocupes.
Estas escupiendo sangre y eso no es estar bien.
-tengo que irme, habra un examen y necesito llegar rápido para no perderlo.
Mateo se incorporo y camino algo adolorido mientras limpiaba la sangre en su barbilla.
Karen lo acompaño hasta su salón.

¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤¤

Karen se encontraba frente a su casillero leyendo una nota, esta decía:
Perdedores junto con un dibujo muy horrible de Karen y mateo juntos tomados de la mano. El dibujo era como si un niño de kinder lo hubiese dibujado.
Abrió el casillero y una nota mas pequeña se encontraba dentro.
Una nota personal ahora, genial.
-dijo Karen sarcasticamente-.
La abrió y era de mateo, o esa parecía ser su letra.

"Nos vemos en el parque cerca de tu trabajo a las 8:00 pm."

¿Que tendrá planeado hacer ese idiota?, parece que la golpiza que le dieron no le dolió.

              >>Mas tarde<<<

-Karen se encontraba en medio del parque a oscuras con mucho frío y algo molesta-.

Algo en la oscuridad se movió, Karen se asusto y se quedo quieta por unos instantes.
De la oscuridad salio un humanoide con capucha y una mascara de gas antigua.
Karen se sorprendió al ver eso y estaba dispuesta a correr, cuando el humanoide se quito la mascara y debajo de esta estaba mateo.
-Si viniste-. Dijo mateo algo sorprendido.
¡¡¡Idiota!!!
-casi me das un infarto.
-Dijo Karen algo enojada-.
Disculpa, creo que debí haber llegado sin la mascara.
-explicame por que estamos en medio de un tenebroso parque de noche.
-¿recuerdas lo sucedido en la mañana?
-si, ¿que tienes en mente?.
-iremos a la casa de ese tipo y destruiremos su amado coche-.
-estás loco o que?
-si un poco, te apuntas o que?
-ya me hiciste salir de mi casa. No tengo opción.
-genial, ponte está máscara, es para ocultar tu rostro.
-esta oscuro, no creo que miren mi rostro.
-nunca se sabe.
-Karen tomo la mascara de gato de color negro la miro por unos segundos y se la puso.
Se acercaron a la casa de ese chico, que se encontraba muy cerca de ese lugar.
Al llegar miraron el auto estacionado frente a la casa del chico.
No podemos golpearlo puede que suene la alarma.
-dijo Karen.
Ya lo se, por eso trajimos mascaras por si algo sucede no nos reconozcan.
Mateo traía un bate de beisball en su mochila, se disponía a golpear el auto cuando escucho el extraño rujido de algo en la oscuridad.

Era un extraño perro sin ningún pelo en su cuerpo y de dos cabezas.

KnightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora