× Un hilo rojo ×

× Todas tus versiones ×

Hay muchas versiones de una misma persona para ser exploradas (incluso de uno mismo), como si fuera un juego donde quieres completar todas las misiones; primarias, secundarias y luego te pones a explorar libremente ese universo.

Tú no eres un universo, claro que no.
Eres un multiverso, como yo.
Varios universos conviviendo en un mismo ser, chocando entre sí y generando más Big Bangs a su paso.

Te amo en cada versión que ofrezcas.
Desde la feliz y afable hasta la protectora y celosa.
La triste incluso, me da ganas de tenerte amarrado en un abrazo más que eterno.

Amo incluso las versiones que aún no conozco, o al menos, sé con certeza que las amaré.
Igual que amo pasar una noche de lluvia contigo, igual que amo ver como tus ojos se asoman desde la almohada, buscando el cómo y cuando terminamos aquí.

Amo tener la carencia de ese "Yo no debería estar aquí", que mi mente respondía con otras personas.
No me hago esa afirmación, pues fue reemplazada por una que desconocía.
Aunque por mis problemas de espalda no pueda quedarme allí mucho tiempo, cada que estoy recostada en tu pecho, mi mente me confirma lo mismo:
ESTE ES MI LUGAR.

Últimamente mi universo se cierra, dejando solo a nosotros en escena, compartiendo, amando, riendo, aprendiendo, llorando, enojandonos y reconciliandonos, como si ya nada importase, al menos por lo que dura el fin de semana.
También se me hace cada vez más difícil dormir sin sentir tu piel, tu calor, contigo duermo en paz y creo que lo notaste.

Te amo y cada versión que tengas en ese multiverso, que cada día, mientras tenga aliento o corazón, le seguiré llamando "Mi amor".
Te amo, gracias por dejarme formar parte de tu multiverso.