Capítulo 1

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Capítulo 1

14 de Agosto del 2015

Veo fijamente al cuadro, mis ideas fluían solas, pero aún  no tenía una idea clara de lo que quería plasmar.

Siento un tirón en mi hombro y suelto una maldición entre dientes, casi daño él cuadro.

Me griro encontrándome con mi mejor amiga desde que tengo memoria. Frunsco mi ceño en señal de que estoy algo molesta.

— Pudiste ser menos brusca Daphne.

Ella suelta un bufido:—Te eh gritado y no te has dado cuenta. Es tu culpa.

Alzo mis manos como una culpable. Y es que cuando pinto me concentro tanto que salgo de la realidad.

— Pues querida amiga— junta sus manos y habla muy rápido — mañana hay una grandiosa fiesta y quiero que me acompañes.

—No creo poder — dejo mi pincel en el vaso de agua antes de seguir hablando—creo que tengo que ayudar a mamá en el aseo de la casa.— pongo mi mejor excusa para no ir.

— ¿Te ayudo? — niego — no pienso ir sola a esa fiesta, así que mañana temprano voy a tu casa.

—Pero...¡Dapne!

Grito pero ella se va. Suspiro algo derrotada, la verdad no quería salir el sábado, prefiero quedarme a leer un buen libro a  ir a una discoteca. No podía negar que me gustaba bailar, me encantaba sentirme libre pero, no era el tipo de chica que le gustaba salir todos los fines de semana. Saco mi  celular y miro la hora, una y media de la tarde. Me levanto de mi asiento y voy a lavarme las manos, agarro el cuadro, dejándolo alzado en la mesa.
Agrarro mi maleta y me la pongo sobre mi hombro. Saco la llave que tengo de este salón y antes de cerrarlo veo de nuevo al cuadro.

<<solo un mes y medio más, y estaré allá>>

Cierro la puerta con seguro y me encamino hacia la salida de la facultad de artes. Por él pasillo saludo a algunos compañeros con los que comparto clases, y me sorprendo de verlos ya que es viernes, y por lo general no hay nadie aquí.

—Shopia.

Escucho mi nombre y contengo una risa.
Me giro lentamente y observo a aquel adonis. Lo que más resalta en él son sus ojos verdes con motas cafeses. Esta vestido con una camisa roja, una chaqueta y un pantalon negro. Su cabello negro esta rebelde, y con aquella ropa le da un aspecto de chico malo. Todo lo contrario a él.

— ¿Caden?

— Oh, por Dios Samanta ¡Soy yo! ¡Alex! ¿ Por que me siges comparando con él idiota de mi hermano? — habla él pelinegro con frustración.

Es cierto que odio al estúpido de su gemelo, demonios le tengo fastidio, pero él dolor pasó.

Es imposible contener la risa, corro hacia él y lo abrazo:—Sabía que eras tú Alexander, solo me gusta molestarte.

— Claro y yo aquí sufriendo. —Habla con voz sarcástica.

Me separo y le sonrio — Esta es la última vez que lo digo, no te molestes ingrato. Y  cuentale a tu mejor amiga  ¿ Cómo has podido mentirme acerca de cuando venías?

El suelta un encantadora sonrisa— La reunión fue bastante fácil, además mi papá estaba allí. Yo solo cumplí con ir. — suelta un suspiro— cuando va a entender que no me gusta manejar la empresa.

— Lo entenderá pronto Alex, mientras tanto sige con tus dos carreras. ¡Por Dios! No se como puedes estar en dos carreras. Yo moriría — hago un mueca dramática y él ríe.

Comprometida con su alteza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora