"¡Dahyun!"
Chaeyoung volvió a llamar a su amiga en vano cuando la mayor pasó corriendo junto a una confundida Mina hasta que se la perdió de vista. La castaña quería ir corriendo detrás de ella, cada célula de su cuerpo le estaba indicando que moviera los pies y descubriera por qué Dahyun estaba tan alterada. Sin embargo, decidió no hacerlo. Ella conocía a Dahyun más que nadie, y sabía cuando la chica necesitaba estar sola.
Suspirando, Chaeyoung apartó su mirada del lugar donde había visto a su amiga por última vez y, en su lugar, miró a la chica que ahora se le acercaba con una ligera preocupación en su mirada.
"¿Qué le pasó a tu compañera de cuarto?"
Con un movimiento de cabeza, Chaeyoung miró al suelo y dijo: "En realidad, no tengo ni idea".
Un suave "mhh" fue todo lo que Mina respondió, dejando a ambas en un repentino e incómodo silencio. Con la repentina situación de Dahyun, la castaña ni siquiera había tenido tiempo de sentirse nerviosa cuando vio a Mina salir de su habitación. Pero ahora, al no tener distracción, solo sentía nerviosismo.
"Así que-"
"Tu..."
Las dos chicas se desorientaron incómodamente mientras hablaban al mismo tiempo, Chaeyoung hizo un gesto para que Mina hablara primero, sabiendo que probablemente empeoraría la situación si decía algo.
Mina se aclaró la garganta suavemente, "¿Quieres hablar de lo que pasó?"
Chaeyoung parpadeó sorprendida, esperando que Mina dijera cualquier cosa menos eso. "Um, yo, uh..."
Percibiendo la inquietud de Chaeyoung, Mina añadió. "Si no te sientes cómoda con hablando de eso..."
"¡No!" La castaña contestó, luego se sonrojó y rascó su mejilla sonriendo torpemente. "Quiero decir, está bien. No hay mucho de que hablar, en realidad".
Mina asintió, aunque Chaeyoung sintió que quería decir algo. Pero, la más alta se giró para volver al final del pasillo.
Viendo cómo se alejaba, Chaeyoung no pudo evitar sentirse desanimada. Ahí voy de nuevo, arruinando mi oportunidad.
"¡U-um!"
Chaeyoung se cubrió la boca, insegura de cómo o por qué se le había escapado ese sonido. Vio como Mina se giraba, levantando una ceja. La bajita se quedó mirando fijamente por un momento, admirando la belleza que tenía ante ella (como siempre) y trató de pensar en una excusa por haber hecho aquel ruido extraño.
"Um", volvió a repetir, mirando sus manos que estaban inquietas. "Gracias."
Miró a Mina y notó la ligera confusión en su cara (también notó que se veía ridículamente linda cuando estaba confundida). "Por ofrecerte a hablar y eso", aclaró. "Gracias."
Los rasgos de Mina se suavizaron hasta convertirse en una pequeña sonrisa, causando que el corazón de Chaeyoung latiera más rápido de lo normal y que su respiración se volviera inestable. "De nada, Chaeyoung."
Con eso, regresó a su cuarto y Chaeyoung se sintió aún más estresada y confundida que al principio de ese día, lo que ni siquiera sabía que era posible.
Siguiendo el ejemplo de Mina, Chaeyoung regresó a su habitación y se echó en su cama boca abajo.
Chaeyoung sabía que no era muy inteligente, ni muy observadora cuando se trataba de otras personas y sus emociones, pero estaba segura de que estaba rodeada de las personas más difíciles del mundo.
Primero, Sana, con su molesto complejo de niña buena queriendo ayudarla en todo momento, causando a la castaña una interminable frustración e ira.
Luego estaba Heechul-nim, que le dio una nueva definición a la palabra " irritante " y siempre parecía saber cómo meterse en su cabeza como si tuviera un talento en el que había estado trabajando durante años.
Eran sus habituales fastidios, aunque Chaeyoung al menos estaba acostumbrada a ellos. Ahora, ¿Dahyun también tenía que unirseles?
Por lo general, su amiga era bastante abierta sobre sus sentimientos cuando se trataba de la castaña, pero últimamente, Chaeyoung la había notado algo rara. Ella no había hablado con la chica al respecto, pensando que sólo necesitaba tiempo a solas antes de decírle a Chaeyoung. Sin embargo, su reciente incidente preocupó enormemente a la menor y la hizo preguntarse si debió enfrentarse a su amiga antes; y el hecho de que pareciera tener algo que ver con Chaeyoung la preocupó aún más.
¿Había hecho algo para herir a su amiga sin darse cuenta? ¿Dahyun se ofendió porque no le dijo por quién sentía algo? Chaeyoung se congeló. ¿Y si hubiera descubierto quién le gustaba a Chaeyoung y no estuviera de acuerdo? Las dos nunca habían tenido conversaciones acerca de sus gustos, pero Chaeyoung siempre había pensado que a Sana no le importaría; ella era una persona tan amable, y después de todo a ella tambien le gustaba una chica. No puede estar tan disgustada y decepcionada con Chaeyoung por estar enamorada de otra chica y reaccione mal, ¿verdad?, Chaeyoung tragó con dificultad.
Sin embargo, ese hilo de pensamientos la llevó al centro mismo de sus frustraciones y confusión: Myoui Mina. Chaeyoung juró que la chica debe ser especialista en confundirla.
En un segundo, las cosas eran perfectas, tan perfectas que Chaeyoung creía que había una pequeña posibilidad de que Mina pudiera empezar a corresponder a sus sentimientos, o al menos convertirse en su amiga. Entonces, de la nada, como un interruptor que se acciona, se distanciaba y actuaba como si no quisiera tener nada que ver con la bajita. Lo peor de todo es que Chaeyoung siempre se sentía culpable por alguna razón, como si hubiera hecho algo malo para que Mina actuara tan fríamente con ella. Pero eso no tiene sentido, ¿verdad? ¡No he hecho nada!
¿Verdad?...
Gruñendo, Chaeyoung se dio la vuelta y miró fijamente al techo. Todos estos pensamientos no la llevaban a ninguna parte, sólo la hacían frustrarse más con el mundo y no la hacían llegar a ninguna conclusión.
Bueno, no es precisamente cierto, pensó Chaeyoung sonriendo con amargura. He llegado a una conclusión:
Las chicas son muy complicadas.
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Como dije aquí esta el segundo capítulo de la semana xD
Gracias por leer! <3
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Penguin Underwear
FanfictionChaeyoung no esperaba que pasara nada en particular mientras esperaba fuera de su dormitorio durante un simulacro de incendio a las 3 de la mañana. Especialmente no esperaba terminar sentada junto a una Mina semidesnuda, y definitivamente no pensó...