Nuestra historia, aunque no sea de amor [En edición]

Inspiración

Primera inspiración:
Me he encontrado cesando de inspiración, quizá porque he decidido no vivir en tu recuerdo.
Un chico me pidió el número del celular en el supermercado mientras yo cargaba un kilo de manzanas rojas, se lo di pero no completo, porque ¿Quien pide tu número celular en un supermercado?, pero bueno, me agregué en sus contactos pero sin poner mi último dígito, y como se lo escribí directamente en el celular, seguramente no se dio cuenta.

Segunda inspiración:
¡Demonios! El joven supermercado ha encontrado mi número y me ha texteado, no quiero contestarle pero le contestaré, así como sé que tú no querías dejarme y me dejaste.

Tercera inspiración:
Te extraño, ya no tengo nada más que decir.

Cuarta inspiración:
¿Qué es inspiración? // ya no te extraño.

Sin inspiraciones:
Mi prima se casa y vino a dejarme la invitación en la mañana mientras comía avena con miel, es gracioso, porque dentro de la invitación también viene tu nombre, ¿Debería hablarte para que fuéramos juntos? Así quizá la próxima boda podría ser nuestra.
Ay mi amor, mi amor, amor, creo que hemos cometido uno de los errores más grandes en nuestra vida, el dejarnos nos ha marcado tanto que todavía siento tu ausencia, cinco meses... cinco largos meses, y sigo esperándote sentada en la mecedora frente a la puerta, viéndote llegar con un ramo de grandes girasoles, como cada viernes.
Guardo al menos un pétalo de cada flor que alguna vez me diste, puedes venir a reclamarlos si quieres y serán tuyos, pero recuerda que debo recibir algo a cambio, ¿Qué tal si te los cambio por unos besos? O quizá por tu corazón.