Un albino sin suerte

El esperado dia.

Era viernes por la mañana y por fin había llegado el día del tan esperado viaje al parque de diversiones con temática bobina en Florida.

Lincoln se encontraba en su cuarto; revisando que nada faltara en su maleta, cuando de pronto alguien toca la puerta.

—¡AUCH!— se quejó la voz.

Lincoln recordó que ahora tenia un sistema de seguridad.

—¡Perdon! Pasen.— Lincoln dejo la maleta y se sentó mirando la puerta—. No te preocupes ya puedes pasar.

La puerta se abrió y de ella entro el señor Lynn padre.

—¿Por que tu puerta me electrocuto cuando intente entrar?

—Lisa.

El señor Loud puso cara de "por que me moleste en preguntar" pero la quito rápidamente y le sonrió a su hijo. Se sentó al lado de el y soltó un fuerte suspiro.

—¿Sabes hijo? Es muy amable de tu parte que invitaras a tus hermanas al parque.— el señor Loud miro a su hijo seriamente —. Pero no estoy muy seguro sobre esto... Bueno ya sabes por lo del incidente del año pasado.

—No te preocupes por eso papa.— Lincoln le dio una sonrisa que lo tranquilizó —. No tengo ningún plan vengativo, solo pensé que seria divertido para ellas asistir.

—No eres tu el que me preocupa, son tus amigos... Es que no se como vallan a reaccionar cuando vean que ellas también asistirán.

—Bueno tengo que admitir que al principio no les agrado la idea pero les hize prometerme que no intentarían nada... Además van a estar muy ocupados para si quiera pensar en ellas.

—Si tu lo dises.— se podía ver en la cara del señor Loud que no estaba convencido del todo pero al menos ya estaba mas tranquilo—. ¿Y ya le hablantes a tus hermanas sobre el acuerdo?

Lincoln puso cara de sorprendió ya que casi nunca se le pasaba por alto un detalle de su plan pero sin embargo avía olvidado contarle a sus hermanas sobre el acuerdo.

El señor Loud al ver la cara de su hijo sonrió y lo tomo del hombro.

—Bueno solo faltan 30 minutos para que nos vayamos... Yo creo que debes darte prisa.

Lincoln se levanto de su cama y salio de la habitación gritando «¡JUNTA DE HERMANOS! ¡ES UTRA URGENTE!»

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Todos los hermanos que asistirían al viaje se encontraban en el cuarto de las hermanas mayores preguntándose ¿que ocurría?

—Bien.—Lincoln llamo la atención moviendo las manos en lo alto—. Las llame aquí por que quisiera decirles algo.

Lincoln les explicó rápidamente el acuerdo que avía podido conseguír con sus amigos.

—Asi que pueden estar tranquilas, no intento matarlas.

—Yo no me preocupe ni un segundo.— dijo Lynn mientras hacia un movimiento de mano indicandole a su hermano que no se preocupara—. Tu no eres esa clase de personas.

Todas concordaron con la castaña y Lincoln se sintió alagado por la opinión que sus hermanas tenían de el.

—Bueno ahora que ese punto a sido aclarado, creo que lo mejor seria ponernos a empacar ya que solo faltan...— Lincoln miro en su Relox y sus ojos se abrieron como platos. —¡12 MINUTOS! ¡DEMONOS PRISA!

como un rayo; todos los hermanos salieron de la habitación (menos Leni) y se fueron a revisar sus maletas.

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