Las crónica de Charles: ningun hombre vive en la casa Loud.

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Charles POV

Los días pasaron, tristemente todo seguía tal y como antes. Mi querido amo de cabello blanco seguía en la misma situación de antes incluso me atrevería a decir que ha empeorado con forme pasa el tiempo. La única de mis amas que no lo lástima ni lo insulta es la joven Leni. Me agrada Leni. Siempre la vi como la única de la familia, que verdaderamente, se interesaba en los que estaban a su alrededor.

Mi amo Lincoln dormia conmigo en mi casa, no era mucho espacio pero era mejor que dormir en el húmedo césped de la casa. Las semanas pasaron y la esperanza de que todo volviera a la normalidad se fue perdiendo de la mente de mi amo, sinceramente, también de la mía.

Todos y cada uno de los días de la semana, a todas horas, el amo Lincoln era golpeado, arrastrado contra su voluntad o simplemente ignorado por su familia. Yo no lo entendía, lastimosamente no había nada que yo pudiera hace; más que compartir mi techo con él.

Después de todo el era mi amo, tenía que serle fiel a pesar de todo. Aún con esa botarga de ardilla, no podía dejarlo solo. El tiempo siguió, exactamente un mes, y nada cambio.

Salvo que ahora ya ningún varón vivía en la casa Loud, que ahora era enteramente propiedad de las mujeres. No sabía a donde se había ido el señor Loud, y la verdad, no me interesaba. Sólo quería que mi amo Lincoln pudiera dejar de sufrir, o que no comenzará a llorar cada noche en silencio... Sólo quería que fuera él de nuevo.

La botarga, aún si la señora Loud la lavaba una vez al mes, no dejaba de apostar horriblemente en los días más calurosos. El día de lavado era el momento en que más me dolía ver a mi amo Lincoln. Su cuerpo estaba completamente demacrado por golpes y cortes, junto con la irritación que la botarga generaba en su piel.

Ojalá todo fuera como antes. Donde todos eran felices. Si pudiera hacer algo lo haría. Me siento inútil cada vez que el amo Lincoln es golpeado sin que yo haga o intente algo. Incluso mi querida Lana ha maltratado al amo. Su llave de fotaneria roja le pegaba más fuerte que todo en la casa.

Tiempo después el amo Lincoln sufrió un horrible accidente en el cual perdió sus dos dientes frontales. Una pena en verdad.

Dolía ver que ya nadie en la casa Loud sintiera cariño ante el amo Lincoln. ¿Qué les había hecho para merece semejante trato? ¿acaso les faltó al respeto? Sea lo que sea no valía tanto odio.

Un albino sin suerte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora