Kenny's POV
Todo era un embrollo de números y fórmulas con el tema nuevo de matemáticas. Enserio, ¿Qué mierda? ¿Y qué pasa si yo quiero ser actor porno? Las malditas matemáticas no me sirven de nada ¿O acaso voy a estar azotando a una chica mientras le hago decirme las tablas de multiplicar? Ugh, que mala combinación.
Veía a Butters hablar y hablar. Me gustaría poder prestarle atención, pero me perdí cuando empezó diciendo: "En matemáticas nos han mandado estudiar las áreas de las..." Y ya.
–¿Alguna duda?–clavó sus ojos celestes en mi.
Yo rápidamente negué, esperando no causar sospechas en él. Butters simplemente asintió y se estiró en la silla.
–¿Qué es lo siguiente?–cuestioné revisando la libreta.
Español. Dios mío, la pereza se apoderó de mí de inmediato. Mi rostro debió haber sido un cuadro, pues escuché la tierna risa de Leo a mi derecha.
–¿Tanto odias esa materia?–alzó una ceja sonriendo.
–Soy una basura, y la profesora me tiene manía.–apoyé la cara en el escritorio.
–Si no le hubieses dicho el primer día de clases que tenía cara de orto porque su marido no la tocaba ni con un palo, otro gallo cantaría...–comentó Butters, sacándome una sonrisa de oreja a oreja.
Era cierto. No es que fuera muy agradable en nuestra primera conversación... Pero todo fue su culpa, me reprendió solo por ver mi mochila en el suelo. Y ni siquiera era una mujer guapa como para aguantarlo, era una mujer de más de 45 años a la que le apestaba el aliento a bacalao.
–Bueno, empezamos ya.–afirmó poniéndose derecho y cogiendo la libreta.
–¿Podemos descansar?–le miré cansado.
Él pareció pensarlo unos segundos para después asentir levemente y echarse hacia atrás en el respaldo de su asiento. Yo, con toda la felicidad de un Craig al que le han consentido darle una nalgada a Tweak, me tiré en mi cama y saqué una de mis queridas revistas de la mesita de noche.
Butters me miró espectante hasta que saqué la revista. En cuanto vio a la mujer con ropas descubiertas de la portada, su rostro se pintó de un fuerte rojo haciéndome reír levemente.
–¿N-no crees que español importa más...?–frotó sus nudillos.
–Mantequilla, estás son mis diosas.–exclamé.–Ven aquí, ven aquí.
Le indiqué, al ver que se negaba, me incliné hacia él y lo cogí de la manga estirándolo hasta hacer que cayera en la cama. Me miró con vergüenza, un extraño escalofrío pasó por mi esquina dorsal.
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Leopold's POV
Mi mirada estaba clavada en Kenny. Sus ojos azul marino me veían con confusión, haciendo que me preguntara en qué estaría pensando mi contrario. Ni idea, pero el verlo así, con una revista de pornografía en la mano, y mirándome fijamente, lograba que me estremeciera.
–¿K-kenny...?–mi voz salió extraña. Aguda.
Su rostro se acercó al mío. Entré en una especie de trance en el cuál simplemente pude cerrar los ojos con fuerza. Al sentir sus labios en mi frente el corazón se me paralizó. Sentí mis mejillas comenzar a arder, en cualquier momento podría explotar de vergüenza.
Una risilla escapó de sus labios mientras me miraba. Trató de aguantar el resto, pero terminó por reír más y más fuerte.
–¡Pe-perdón Leo! ¡Pe-pero tu ro-rosto es best-tial!–siguió carcajeando.
Y no le reclamé, seguramente mi cara estaría hecha un tomate, y causaría gracia a cualquiera. Simplemente me dediqué a desviar la mirada hasta que Kenneth dejara de reír.
–¿Creíste que te iba a besar?–cuestionó al dejar sus risas de lado.
Lo miré queriendo reclamar, pero su rostro serio esperando una respuesta logró que me lo guardara para mí.
–No...–rasqué mi mejilla.–Pero el ver esa revista me puso nervioso.
–Oh.–sonrió él.–Pero es de lo más normal en los chicos de nuestra edad, ¿Tú no tienes?
Negué levemente. Podría ser que sí, lo más normal era interesarse por... "Hacer ñiqui ñiqui" a estas edades, pero el tema me avergonzaba a más no poder. Además, con unos padres como los míos, en cuanto detectaran la revista me castigarían.
–Ya veo.–me revolvió el pelo.–¿Quieres verla conmigo?–alzó las cejas pícaramente.
–No, gracias.–dije con un rubor leve en mis mejillas.–¿Estudiamos ya? ¿O espero un poco a que la mires?–cuestioné refiriéndome a la revista.
Miró el papel entre sus manos y después me miró a mí, así repetidas veces hasta que dejó la revista de mujeres desnudas a un lado y se levantó para sentarse frente al escritorio.
–Estudiemos, no quiero robarte mucho tiempo.–rió él.
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767 palabras.
¿Estuvo chido? Espero que sí.~🌝✨
Me dicen si hay faltas ortográficas, que son las 2:13 am y no tengo mis 5 sentidos al tome :'-), BAI💜💜
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🐰×.lιттle lovely вoy.×🐰
FanficKenneth McCormick, un donjuán de cabo a rabo ¿Relaciones serias? ¿Acaso eso se come? Por favor, ese rubio no mantenía a una sola mujer por más de tres días. Sólo le interesaba meter el pene en cualquier agujero, ya fuera femenino, o masculino. Era l...