Capítulo 7

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Ya estaba sonando el timbre que marcaba el fin de las clases. Demasiado pronto para mí. Como todo lo que estaba sucediendo aquel lunes tan gris.
No quería volver a casa y verlo de nuevo allí.
Aquella mañana al levantarme, había olido el dulce aroma del Cola Cao, y sabiendo a quién pertenecía, me había marchado de casa sin desayunar.
Como muchas otras mañanas, los periodistas que conocían mi ruta a la escuela me acosaron con preguntas sobre mi madre. Normalmente, yo les habría respondido de un modo borde, pero aquella mañana ni siquiera les dirigí la palabra. Para mí eran fantasmas. O mejor dicho, yo era el fantasma, el que no les podía oír, y al que todos podían traspasar.
En clase no pude concentrarme bien, no cesaba de darle vueltas al mismo asunto una y otra vez. Los profesores me preguntaron que me sucedía, pero yo no les había respondido.

Y como yo no tenía amigos, nadie más se interesó por mí.

Recordé el día en que él había llegado a casa.
El día en que me había deprimido por su presencia.
El día en que él me había consolado. Y el día siguiente fue el día en que él se interesó por mí. Me hizo el desayuno, porque le había gritado. Averiguó el porqué de mis preocupaciones. Esos días parecían tan lejanos… Ahora lo que tenía que hacer era regresar a casa y enfrentarme a sus miradas de aborrecimiento.

Sowon me había puesto un mensaje ofreciéndose para ir a recogerme al instituto, pero yo lo había rechazado, no me sentía con fuerzas para ser amable.
En el trayecto a casa traté de leer un libro para distraerme, sin éxito.
Me había tomado el ibuprofeno hacía mucho, y no podía hacer más para aliviar el dolor, que se había intensificado nuevamente al no haber nadie animándome. Y por si fuera poco, tenía los labios llenos de heridas que me recordaban al fatídico momento del día anterior.
Enfrente de la puerta de casa, reconsideré comer allí o marcharme a algún restaurante de comida rápida, si es que iba realmente a comer ,pero me dije que no podría estar así toda la vida, lamentándome de mi suerte y dejando que un estúpido niñato homófobo condicionara mis situaciones.

Con esta disposición, metí la llave en la cerradura y empujé la puerta

-Ya estoy en casa… -murmuré y al entrar, me encontré con una “encantadora escena”, en la que Sodam y su futuro esposo se besaban, justo enfrente de mí. Era lo que me faltaba por ver.

-Jungkook… -dijo mi madre, con preocupación. Él tan solo me miraba inexpresivo. ¿Cómo podía ser tan frío y tan cruel?

-No tengo mucha hambre, mamá… -intenté decir de forma clara, sin comenzar a llorar. -Voy a comer en mi cuarto.

-Pero hace ya dos días que no comemos juntos…

-Es que no me encuentro muy bien… -me excusé. Pero en cuanto oí lo siguiente, no tuve fuerzas ni para excusarme.

-Deja de poner excusas y complace a tu madre, que ya muchas molestias le estas dando.-Un nudo se me formó en la garganta al escuchar su voz. Era su voz, su timbre, pero había perdido la dulzura y la alegría, y ahora era helada.

Como el de un autómata, mi cuerpo obedeció sin que yo pudiera hacer nada, dejando la mochila a un lado, junto con la chaqueta, y andando a la cocina, lavándome las manos sin ánimos para luego sentarme en  la gran mesa del salón, la cual ya estaba preparada.

Mi madre y su pareja se sentaron en el lado opuesto de la mesa, y yo cogí el tenedor sin ningún apetito.

Empecé a fingir utilizarlo, con la mirada perdida en algún punto del que ni yo era consciente.
Sentía la mirada de mi madre clavada en mí, pero no me importaba en ese momento.
La última frase que acababa de escuchar era demasiado fuerte como para preocuparme por nada más. Había tenido un segundo significado.
Él había insinuado que yo había traicionado a mi madre, al besarlo a él.
Ahora me había hecho sentir como lo peor que la naturaleza pudiera haber concebido nunca.
Por un segundo medité la idea de echarme a llorar allí mismo, sin aguantar nada más, pero quería demostrar ser fuerte, aunque por dentro me estuviera muriendo de pena.
De súbito, alguien soltó los cubiertos sonoramente, y no pude más que levantar la mirada, para ver que había sido ella.

El Novio De Mi Madre ~ Jinkook [COMPLETO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora