Blog familiar

-Cocinar, comer y saborear-

Es un placer el volver a hablarles estimados lectores, soy Sebastián Michaelis Phantomhive, quien en esta ocasión viene a hablar de un tema bastante trivial y, a su vez, curioso, si lo menciona un demonio completo como yo.

Por supuesto, en esta nueva entrada al blog, no me encuentro solo, me acompaña uno de mis yernos.

Mucho gusto, soy Alaude Blair.

Su compañía, en esta ocasión, se debe a que hablaremos de algo en lo que él, por ser un chef bastante capaz, tiene una basta experiencia, y hablo de: la comida.

La comida puede variar en muchas cosas, ya no solo por su región de procedencia, sino por el sabor de los mismos ingredientes, las variaciones en los sazones de aquellos que cocinan, la forma o "maña" que el cocinero pueda tener al seguir una receta, los sabores que se adaptan al gusto del comensal ya sea por condiciones de salud o por sus preferencias.

Hay un sin fin de detalles que se toman en cuentan a la hora de cocinar, por ejemplo: en nuestra familia somos ligeramente, por no decir que demasiado, exigentes con los alimentos y su preparación, incluso con el origen de los ingredientes a usar, de ello te haz dado cuenta ¿Verdad, Alaude?

Así es, siempre me veo sorprendido cuando abastecen las alacenas, como chef que soy, siempre me emociona el ver ingredientes tan variados y de distintos sitios, abre un sin fin de posibilidades para experimentar y conseguir el mejor sabor.