Problemas para el Hokage {Kakashi}

Capitulo 25 - Hora de comenzar

Capítulo 25 - Hora de comenzar

-Es algo lógico ¿no? Querer servirle a quien te ayudo, es lo que yo siento cuando veo a Hotaru -respondió ella.

-en efecto sí, pero desde mismo modo es algo malo, te conviertes en una herramienta para esa persona, solo vale la pena si esa persona siente lo que tu sientes, Orochimaru solo nos veía a todos sus subordinados como herramientas, o un medio para un fin -explique.

-Y ¿tú crees que Hotaru me ve como una herramienta? -pregunto ella dudosa y con una expresión seria.

-es lo que creo, lo veo en su cara, cuando estoy cerca me da la misma sensación que Orochimaru me daba, como si él fuera un depredador y yo su presa, es un sentimiento que persiste incluso ahora -dije levantándome, ella hizo lo mismo.

"Orochimaru había logrado conseguir lo que más quería, cambiar de cuerpo a su voluntad para poder sobrevivir, pero había resultado con un fallo, el cuerpo que realmente había deseado era el de ese chico del clan Uchiha, Itachi, había pasado varios años planeando eso, y para él había sido mucha suerte que el chico se hubiera unido a Akatsuki, una organización de criminales de rango S, después de un tiempo consiguió ser su compañero pero fallo en conseguir atraparlo, deserto de la organización, y esta aun la seguía buscando , pero Orochimaru era un hombre astuto, también había acumulado un montón de subordinados que hacían todo lo que él pedía, Kimimaro Kaguya era uno de ellos, él ultimo de su clan, servía a Orochimaru sin rechistar y era realmente fuerte, el futuro cuerpo de Orochimaru si no surgía ningún inconveniente, además de eso había desarrollado la marca maldita, era un estado donde el cuerpo ganaba una fuerza descomunal, pero solo unos pocos conseguían dominar ese estado, Kimimaro entre ellos, yo me había negado ya que no creía en la fuerza prestada prefería ganar poder con mi propio esfuerzo.

-por fin te encuentro -la voz de Kabuto me saco de mis pensamientos, levante la cara de los pergaminos para mirarlo, tenía una expresión seria y estaba acomodando sus lentes, esa manía que nunca dejaba.

-¿Qué sucede? -pregunte volviendo la cara a unos cuantos pergaminos sobre la mesa, todos ellos eran sobre jutsus prohibidos, me había empeñado a aprender algunos de esos jutsus.

-Orochimaru-sama quieres que le eches un ojo a Sayumi-chan, Kimimaro-san ha estado cuidando de ella pero él no puede llevarla a todos lados -dijo sentándose sobre la mesa enfocándose en mí.

-sabes muy bien que no me llevo bien con los niños, porque no le das la responsabilidad a alguien más -dije con una mueca.

-no podemos, esa niña posee un Kekkei Genkai poderoso, no podemos dejarla a supervisión de cualquiera, tienes que ser tú, eres la única lo suficientemente fuerte para resistir a cualquiera de sus genjutsus, es una niña malcriada y no acepta ordenes de cualquiera, solo de Orochimaru-sama o Kimimaro-san -explico él, considere todas mis opciones, estaba cansada de todo en particular, de matar, de entrenar, de la vida, tal vez la niña haría despertara un poco.

-si acepto, también tendré que echarle un ojo al otro mocoso, a donde ella va ese niño la sigue -replique.

-ese niño tiene gran potencial, Sayumi-chan es buena notando el potencial de las personas, ¿aceptas o no? -pregunto y enrolle los pergaminos, di un gran suspiro y me levante.

-Lo haré -respondí y Kabuto se bajó de la mesa comenzando a caminar, lo seguí de inmediato, la guarida donde nos encontrábamos era un poco distinta a las otras, esta no era un laberinto, lo que era algo típico en las demás, caminamos hasta que llegamos a una amplia sala, una sala de entrenamiento, la niña se encontraba ahí junto a ese pequeño mocoso y a Kimimaro, los dos chicos tenían cabello blanco, bueno los tres lo tenían, Kabuto, Kimimaro y el niño, el cual no recordaba su nombre, las únicas de cabello negro éramos nosotras.

-Kimimaro-san, Eris-san ha aceptado cuidar y vigilar a Sayumi-chan -hablo Kabuto acercándose a ellos, por mi lado solo me mantuve lejos de ellos caminando por él lugar, Kimimaro me miro como si estuviera evaluándome, él se había encariñado mucho con ella, y sabiendo de mi reputación de fría y despiadada no lo culpaba por dudar de mí, él y la niña hablaron por un buen rato pero ella parecía enojada, Kabuto se acercó a mi dejando que ellos se encargaran de sus problemas- al parecer no está contenta -dijo y yo suspire, después de esa pequeña pelea la niña se fue, Kimimaro tenía intenciones de seguirla pero lo detuve.

-yo voy por ella -dije yendo tras la niña, no quería hacer esto de niñera pero no me quedaba otra opción, ella había salido fuera de la guarida he ido al bosque, fue fácil encontrarla, estaba sentada en la rama de un árbol- odio esto más que tu pero no tenemos opción -dije recostándome en el árbol.

-quiero quedarme con Kimimaro -respondió y rodé los ojos, eso era infantil.

-Kimimaro no puede encargarse de ti, él está ocupado y hay algunos lugares a los que no te puede llevar, aun no eres lo suficientemente fuerte -le dije llevando mi mano a mi porta kunais, podía sentir varios ninjas a mi alrededor- yo te ayudare con eso -ella bajo del árbol y me miro.

-necesito ser más fuerte -eso parecía una pregunta pero fue más bien como si declara un hecho.

-si, ahora te mostrare algo -los ninjas decidieron salir de su escondite, sujete a la niña e hice que retrocediera, ataque de inmediato sin vacilar y al terminar todos los ninjas estaban muertos, un solo corte en la garganta había bastado, volví con la niña.

-¿Por qué le has cortado solo la garganta? -pregunto ella con curiosidad.

-es más fácil acabar con los enemigos de esa forma, solo se necesita un corte profundo para lograrlo -respondí simplemente, era mucho mejor así, era más efectivo y no se hacía tanto desastre- volvamos hay que informar a Kabuto de este desastre -comencé a caminar y ella me siguió."

Al terminar de narrar esa parte una explosión que provenía del campamento nos llamó la atención, al mirar la posición del sol supe que la hora que le había dado a Sayumi ya había pasado, era el momento de moverse, me adelante un poco y la chica sujeto mi brazo.

-¿esto es obra tuya? -pregunto.

-Sabes Sayumi se convirtió en una excelente aprendiz, aprendía con rapidez y su visión era excelente, te propongo aprender, ser una discípula en vez de una herramienta, tú decides -ella me soltó al escuchar eso.

-¿Qué hizo que cambiaras? -pregunto de repente, su pregunta me tomo por sorpresa, y me tome unos segundos en responder.

-alguien me hizo cambiar de opinión, pero esa una historia para después -dije y me fui dejándola sola, tenía que ayudar a Sayumi y al chico Uchiha, aunque ellos eran buenos los superaban en números, y mucho de estos ninjas poseían un Kekkei Genkai, o alguna habilidad especial- bueno es hora de comenzar con esto -murmure volviendo al campamento.  

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siento haber tardado, estaba desde ayer intentando publicar pero mi internet anda lento, espero les guste el capitulo, quería mostrar un poco de la vida de Eris

bien, comenten, voten, hagan lo que quieran, se les quiere :D

***Zharak***