El Era Prohibido

2.Encuentro

La temperatura que hay fuera me obliga a ducharme con agua fría aunque también me ayudo a despertar mejor. Me envuelvo en mi toalla para salir de mi baño y dirigirme a mi cama en la cual está el vestido que ocupare en la noche, para ocupar el resto del día me decido por un buzo, un top y mis deportivas, dejo mi pelo secarse con el aire que se cola por mi ventana y me siento en el sofá al lado de esta misma para revisar mis redes sociales y ver la publicación de mi hermana sobre su cumpleaños.

—Definitivamente no será solo una junta de amigos — Me rio al imaginarme la cara de mamá si descubriera lo que planea Dani, mi celular suena anunciando la llamada de Dai, mi mejor amiga, de inmediato le respondo — ¡Hola Fea!

—Ja ja que graciosa —Dice sarcástica — ¡Hola belleza!, ya vi la foto de tu hermana, supongo que estoy invitada y de honor ¿No?

—Claro que sí, tienes que estar aquí a las 8:30 para que nos ayudes a ordenar un poco porfiis — Hago puchero, a pesar de que ella no puede verme.

—Y más encima ¿Debo ordenar?, no broma amiga obvio les ayudare nos vemos a la noche.

—Nos vemos — Corto la llamada y le envió un mensaje a Andrew, mi vecino y mejor amigo tres años mayor, diciéndole lo mismo que a Dai, el responde de inmediato diciendo que estará a la hora.

—Hola Pequeña— Volteo mi cabeza y corro a abrazar a mi padre — ¿Cómo estás?

—Bien aburrida pero bien— Sonrió separándome un poco de el — ¿Ya se van? — El asiente con la cabeza —Bien, más vale que te apures, sabes que a mamá no le gusta esperar mucho —Beso su mejilla, parada de puntillas—

—Dile a tu hermana que cuide la casa — La sonrisa se me borra y mi cara pasa a ser seria— Si, yo se lo de tu hermana, además ¿De dónde crees que saco dinero? — Me sonríe y besa mi frente. Comienza a caminar hacia la escalera, lo sigo dejando mi puerta cerrada, cuando llegamos abajo nos encontramos con Dani, con mi mamá y con sus maletas

—Nada de desorden por favor Danitza, cuídense nosotros volvemos en dos días — Nos da un beso en la frente a ambas — Las queremos mucho — Mi madre sale por la puerta y mi padre riéndose por el dramatismo de mamá solo se despide con la mano, Dani y yo repetimos el acto al ver el auto desaparecer al doblar en la esquina.

—¡Libres! Al fin, llamare a Adam para que traiga las cosas— Camina a la cocina tomando el teléfono—

Subo a mi habitación y coloco música, tengo todavía tres horas para que llegue Dai, tomo el libro que deje bajo la almohada y como siempre me siento en el sofá de la ventana a leer

El sonido de un auto estacionándose me despierta, me asomo por la ventana y veo que ya está atardeciendo, el vehículo estacionado frente a la casa pertenece a Adam, mi hermana ayudándole a bajar, por lo que veo, las decoraciones y botellas, veo la hora en mi reloj de mano, aún falta media hora para que lleguen mis amigos. Como todavía tengo tiempo para dormir, me recuesto en mi cama, cierro mis ojos pero no consigo conciliar el sueño asique mejor me levanto y abro mi puerta para ir a ayudar abajo, pero me encuentro con él.

—Hola Nhoa— Me saluda alegremente, yo tengo que inclinar la cabeza para poder ver al castaño frente a mí, ese que en algún momento de mi niñez me sentí atraída, pero como dicen siempre "Cosas de niños"

—Hola Adam— Sonrió a boca cerrada