— Me caen mal los soldaditos.
Sargento Highway: ¿Que has dicho?
— Si quieres darle por el culo a ese muchacho no hace falta tanto rollo, so capullo.
Sargento Highway: Creo que hablas por experiencia propia.
— ¿Que quieres decir cabrón de mierda?
Sargento Highway: Quiero decir que tengas cuidado. Que tengo mucha mala leche ¿sabes? Como alambre de espinas y meo napalm, y puedo traspasar el culo de una pulga de un tiro a doscientos metros. Así que vete a machacártela por ahí, cara de perro, antes de que te rompa los morros.
— No hablarás tanto cuando te haya metido los cojones en la boca ¡maricón!
Sargento Highway: Coge esto chico. Creo que se acaba de declarar la guerra.
[...]
Sargento Highway: Quédate ahí y descansa. Luego te enseñaré lo que es el dolor.
****
Sargento Highway: Soy el sargento de artillería Highway. He bebido más cerveza, he meado más sangre, he echado más polvos y he chafado más huevos que todos vosotros juntos, capullos.
Bien, el mayor Powers me ha dado el mando de esta sección de reconocimiento.— No nos hace falta para nada.
Sargento Highway: Os voy a hacer falta hasta para haceros una paja. Os lo aseguro.
— No me diga.
Sargento Highway: ¡Vosotros no me impresionáis!
— La sección de reconocimiento es cojonuda.
Sargento Highway: Si os habéis creído nenas que vais a poder escurrir el bulto porque vuestro último sargento era una mariquita a punto de jubilarse que pasaba de todo os habéis equivocado. ¡Vais a empezar a comportaros como marines ahora mismo!
— ¿A que ha venido aquí?
Sargento Highway: Te lo voy a decir. Hago esto porque me muero por meterme en la ducha con vosotras nenas. Y porque no quiero que me vuelen la cabeza en un país lejano porque tú no sabes hablar mi idioma. ¿Comprendes?
— Urra.
Sargento Highway: ¿Y tú?
— Sí sargento.
— (Cantando) Sí te amo, por tu culo, por tu culo cojonudo, por...
Sargento Highway: Bueno, bueno, bueno, bueno. Estoy aquí para comunicaros, que la vida tal y como la habéis conocido ha terminado. Más vale que os vayáis al pueblo esta noche, a reíros y a hacer el gilipollas, o a restregar vuestras pichitas contra vuestras novias, o a meterla en cualquier agujero. Pero sea lo que sea hacerlo, porque mañana a las seis de la mañana vuestros culos serán míos.
[...]
Ahora mis cojones contra los vuestros, y perderéis. Así que a las seis de la mañana. Eso quiere decir a las seis en punto de la mañana. Y lo digo para los que no hablan mi idioma.****
Sargento Highway: Así. Muy guapos. Muy majos. Sí. Guapísimos. Esto huele como la fábrica del lidimento sloan. ¡Quitaos las camisetas!
— Sargento hoy sí que son iguales.
Sargento Highway: ¿Iguales que la mía?
— ¿Como coño íbamos a saber que camiseta iba...?
Sargento Highway: Tienes que improvisar, que vencer, que adaptarte. Bien. ¡Quitaos esas camiseta son ahora mismo!
****
— Yo muerdo las pollas y las escupo.
Sargento Highway: ¿Ah sí? Entonces lo mejor será que te tumbes sobre esa mesa y te de por culo.
— ¡¿Que has dicho?!
Sargento Highway: Así podrás ir a tu casa con una sonrisa en la cara y presumiendo de que acabas de cepillarte a un tío cojonudo.
Un día como hoy hace 71 años nació la que a mi parecer es la mayor leyenda del doblaje español. La voz de Constantino Romero nos ha acompañado durante la infancia a muchos. Nos criamos escuchando las voces de Mufasa, Darth Vader y T-800 entre otras.
Aunque Clint Eastwood lo hace genial en el papel del sargento no hay que desprestigiar a su doblador. A pesar de no estar muy sembrado en temas de doblaje este hombre ocupa un lugar especial en la infancia de muchos y quería rendirle un pequeño "regalo" ("homenaje" llamadlo como queráis) con algunas de las mejores escenas de una de sus obras.
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Instantes de Leyenda
RandomFilosofía basura de tele por cable. No, es broma, dejó los guiños a videojuegos y os digo en serio de que va. Voy a escribir frases o momentos de lo que sea que me gusten. Y ya está, sin límites y sin complicaciones.