Los Fantasmas de Sarah

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Era de noche y estaba lloviendo, los cuatro amigos decidieron entrar a un pueblo un poco misterioso que estaba a la orilla de la autopista.

- ¡Tengo miedo! Exclamó Sarah.

- Tranquila, todo va a estar bien, estas conmigo.

dijo Alex tomando su mano.

Y así fue que entraron al misterioso pueblo el cual parecía un pueblo fantasma, las luces de las casas estaban apagadas y no se veía ni una persona en las calles.

Cerca encontraron un motel donde fueron a hospedarse para pasar la noche. Al entrar estaba en la recepción un anciano un poco raro de una piel muy pálida y cabellos blancos con unos ojos negros y profundos como la noche.

Los chicos se registraron sorprendente mente estaba lleno así que tuvieron que compartir habitaciones, Sarah y Ali decidieron dormir juntas y a su vez Alex y James no tenían más remedio que dormir juntos.

Estaban la cocina de una de las habitaciones a ver que preparaban de cenar y de repente las luces empezaron a encenderse y apagarse, se escuchó un ruido que venía de la otra habitación, los amigos decidieron ir a ver que era.

- ¡Estoy muy asustada, deberíamos irnos a dormir! dijo Sarah.

 Pero a los chicos no les agrado mucho esa idea y no le hicieron caso.

 cuando estaban a punto de entrar a la habitación de repente se escuchó un fuerte golpe seguido de un grito estremecedor...