Yo, Maya [PAUSADA]

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Al siguiente día me levanté, me serví cereal, desayuné, me duché, me vestí y me fui a la escuela

— ¡Maya! -Gritó Teresa antes de irme, yo me volví a mirarla- Cuando llegues, tengo que hablar algo contigo, es sobre la escuela. Ahora, fuera

Sin decir nada me fui, al llegar al patio, lo primero que vi, fue a Lola, besándose con Brayan. No me importó, pero algo me dijo que tenía que mandarlos al demonio, ya era hora de madurar

Me acerqué a ellos y jale el cabello de mi "Mejor amiga" para luego estrellarla contra el piso

— ¡Eres una maldita zorra Lola Castro!-Le grité- ¡Pudrete y ojalá te mueras y te tortures en tus propios calzones!. ¡Y tú!-Le grité a Brayan- Eres un hijo de puta, que jamás serás lo que piensas que eres, un hombre. No puedo creer que lo hice con uno de diez centímetros -Le dije, después le escupí y salí de allí.

Por fin sentí esa sensación de madurez, ya no tendré que aguantar a Brayan, ni a Lola, ahora sólo seré yo, la gimnasia y yo.

•••

— ¿Le reventaste la nariz a Lola Castro?-Dijo Teresa apenas entré a la casa.

— So hice una mueca- Se lo merece, y lo sabes ¿Cómo lo supiste? -Dije.

— El director me llamó, al parecer Lola se fue a quejar -Dijo.

— Maldita esa. ¿Qué querías decirme? -Dije.

— Maya... Ya no irás a la universidad, no tengo dinero para pagarla, este mes termina y también la escuela, te dedicarás a la gimnasia. Hoy tienes entrenamiento para la competencia que va a ser en tres meses, hoy, a las ocho, te quiero ver allá -Dijo.

— Pero...-Traté de decir.

— Nada, no me respondas perra -Dijo, yo maldije para mis adentros y fui a alistarme, hoy tengo que ir a donde Carlos.

Después de comer, Teresa se fue a trabajar y yo a la casa de Carlos.

— Hola...-Dijo- Pasa.

— Hola... ¿Carlos verdad? -Él asintió- No tengo mucho tiempo, empecemos

— ¿Tendrás que ir para donde tu novio?-Preguntó.

— Ex...Novio -Dije- Y no, tengo que entrenar para una competencia que va a ser en tres meses y tengo que esforzarme para después llegar a los juegos Olímpicos

— Te ves linda cuando te propones algo -Dijo.

— Claro...Bueno -Dije- empecemos. El hip-hop es algo que te tiene que salir natural, el rock y el merengue es algo diferente.

Esa tarde, Carlos aprendió rápido, pero eso no significa que lo haga bien, eran las seis, y nos tomamos un descanso.

— ¿Irás a la universidad?-Preguntó él

— No... Mi mamá no puede pagarla, me dedicaré a la gimnasia -Dije- ¿Tú?.

— Si... Yo este... Estudiaré ingeniería -Sonrió, yo también.

— ¿Vives con tus padres? -Pregunté.

— No... Solo -Dijo con lástima- Cuando cumplí dieciocho ya era mucha carga para ellos, mi tía me rentó esta casa, y aquí estoy, tanto con mis ahorros y los de mis padres, pagamos la escuela. Y con lo que estoy ganando por arreglar carros, pagaré mi universidad.

Ambos quedamos en silencio.

— Y qué. ¿Te gusto? -Pregunté.

— Eres muy hermosa-Dijo.

— No lo soy -Dije, lo volví a mirar, y fue como si fuéramos un imán, ambos de un solo golpe nos unimos a un apasionado beso. Besaba bien, con eso me bastaba, era lindo, y tierno, también me bastaba.

— Tengo que irme, es tarde, adiós Carlos -Dije despidiéndome, el me sonrió e hizo un ademán con su mano izquierda.