°•[Capítulo 9]•°

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Narra: Elizabeth.

una luz iluminó toda la habitación en dónde estábamos... Era tan potente, pude notar que era una linterna, me alumbraron justo en mis ojos, miré hacía otro lado, porque aún veía esa pequeña luz en mi vista, parpadée un par de veces y por fin pude ver bien, miré hacía adelanté, y me dí cuenta de que John no estába, miré hacía la puerta, y los que estaban alumbrando eran Arturo y Pablo.

Elizabeth: ¡¿que hacen aqui?! (Estado gavioootas, temazo 7u7 okno xD me pongo sería uwu )

Pablo: te dije que terminaríamos el trabajo, ¿tú que haces aquí?

Arturo: eres satánica?

Elizabeth: porqué lo dices?

Arturo: o sea, en plena noche, en el bosque... Jugando a la Ouija...

Pablo: además, ¿que es eso en la pared? ¿Es sangre? ¿Mataste a alguien?

Arturo: ¿por qué dibujaste ese símbolo diabólico ahí?

Pablo: ¿le diste tu alma al diablo? ¿O ingieres drogas?

Arturo: eres adicta?

Pregunta tras pregunta, hasta que me estresaron.

Elizabeth: ¡CALLENSE! -Grite a mas no poder-. ¡por qué tienen que ser tan idiotas!

Pablo: tú en nuestro lugar... ¿Que habrías pensado?

Elizabeth: me daría lo mismo... Es su vida, hagan lo que quieran con ella, además, yo no andaría en el bosque a la noche.

Arturo: QUEEE? -hizo un gesto raro-. ¿Que no andarias en el bosque a la noche? Entonces... ¿Explicanos en dónde estás TÚ ahora?

Elizabeth: o sea... Eso no les incumbe. -respondí.

<Quién se creen esos idiotas, ¿ahora quieren que yo les informe de todo lo que sucede? Ja, claro que no.>

Volteé para no verlos a la cara. En ese momento sólo pensaba... ¿Dónde estará John?

Pablo: mirame a los ojos! ¡¿Qué éstas asiendo aquí?! -insistió.

Arturo: Elizabeth! -grito.

Voltee a verlos y les dije.

Elizabeth: miren, un amigo me invitó a su cumpleaños, no lo iba a dejar solo... Además esto me ayudaría a relajarme un poco, ¿o que querían? ¿Que este en mi casa llorando? Mejor déjenme tranquila y váyanse de aquí... Éste lugar esta totalmente libre de espírit...

*BUM* ~se escucho un ruido~ Algo se cayó algo en el segundo piso.

-¿qué fué eso? -dijo Arturo.

-no lo sé. -respondí.

Subimos Al segundo pisó, intentamos de no hacer ruido, pero con esa casa tan antigua era imposible hacer que el piso no crujiera.

-graba esto Arturo. -dijo Pablo.

Llegamos al aterrador pasillo, mi cabeza en ese momento sólo pensaba, <¡dónde estará John!> estába muy asustada, yo iba detrás de ellos, entramos a una habitación que era bastante grande, estába muy obscura, de pronto vimos a una silueta extraña en la ventana,

-¿qué es eso? -susurro Arturo.

Sentí que mi corazón se me saldría del pecho, tenía mucho miedo, de pronto se escucho un «vallanze» los chicos al oírlo salieron corriendo de la habitación y me dejaron sola ahí, obvio iba a seguirlos pero la puerta se cerró en mi cara,

¡AYUDA!! -Grité con todas mis fuerzas.

-no temas. -susurro en mi oído.

Tenía muchas ganas de llorar, mi corazón latía muy rápido, sentí un escalofríos, estába aterrada, me congele enfrenté de la puerta y voltee lentamente a ver lo que había detrás de mí. «¿tienes miedo?» dijo, yo me quedé en silencio y cerré mis ojos. De pronto volví a escuchar lo mismo «¡¿TIENES MIEDO?!» esta vez, la voz se escuchó un poco más fuerte, en ese momento corrí a un esquina y me senté ahí, cerré mis ojos y dije. -acorasame en tu sangre señor. -lo repetí una y otra vez sin parar. «CALLATE!» obvio no guarde silencio y seguí. -padre Nuestro que estas en los cielos, santificado sea... -de pronto sentí que mis labios estaban pegados, al intentar abrir mí boca, sentía mucho dolor, sentía que se me salían los "cueritos" De los labios, no pude seguir hablando, intentaba abrir mi boca pero por más que trate, no pude, no podía dejar de tiritar, sentía mucho miedo, me sentía desprotegida, sentí que ese sería el fin de mi existencia <dónde éstas john> pensé. De la nada mis lágrimas comenzaron a caer. «¿tienes miedo?» repitió.

-sii! -dije. Al parecer ya podía hablar-. Yo no soy una mala persona, Déjame por favor, soy muy joven, tengo toda una vida por delante! -no me aguanté y lloré.

-¿por qué me tienes miedo? ¿Es por qué mi cara está desfigurada?

-¿qué? Ni siquiera eh visto tu-tu cara.

De la nada, las luces de la habitación comenzaron a pestañar, sentí que me daría un ataque, cuándo las luces finalmente se prendieron, pude ver a una especie de criatura, era como una persona pero sus ojos eran totalmente negros, su cara estába demaciado desfigurada, la sangre caía sin parar, su boca estába realmente abierta, tenía puesto algo que era como una especie de bata, creo que era una chica. Cuando la ví completamente, pude sentir que me Desmayaria, además, el aire era muy frío, de pronto ella se tiro al suelo, se puso a gatear, de pronto Pará y agacha su cabeza, se puso a reír mirando hacía abajo, y comienza a levantar su cabeza lentamente, y no paraba de reírse, yo estába en shock, de pronto me mira fijamente a los ojos, yo no la miré directamente porque sentía que si la miraba, algo malo me ocurriría, me Miró fijamente y se comenzó a acercar lentamenteme a mí, hasta que puso su nariz en la mía, un escalofríos recorrió todo mi cuerpo, quería gritar, pero me mantuve en silenció.

-qu-que quieres de...-puso su dedo en mi boca-.

-shh, guarda silenció, bonita. HAHAHA. -Dijo con una voz malévola y con una risa realmente malvada.

Mi respiración se aceleró, ella estába casí encima de mí.

-!¿que me aras?¡ -grité.

-daño, mucho daño.

-deja que me valla, por favor. -dije llorando.

-¿por qué lo aria? ¿Que gano con eso? -en ese momento se alejó de mí y se levantó-.

Pude notar que sus piernas tenían muchas heridas. De la nada, un cuadro que estába en la habitación cae, al caer, dí un pequeño salto, sentía tanta angustia, sentía que me daría un ataque al corazón. «¿tienes miedo?» Repitió.

-NO. -grité, grité tan fuerte que ella dijo ¡ah!, de la nada, ella se desvaneció, la habitación se oscureció al instante, las lagrimas caían sin parar de mis ojos, no quería levantarme de ahí, sentía una sensación extraña, No sabía si salir de ahí o quedarme en aquel lugar, porque... ¿Y si me iba y ella me estába esperando afuera de la habitación? O ¿si me quedaba ahí y ella volvía? En serio... No sabía que hacer, de pronto escuché un enorme portazo abajo (del primer piso) al escuchar eso, me escondí detrás de unas cajas que habían en el cuarto dónde estába yo, me escondí detrás e intente de no hacer ruido, de pronto escuche crujidos en la escalera, ¡se estaba acercando a dónde estába yo! Mi corazón ya no podía latir más rápido de lo que ya estába latiendo, de pronto sentí que la puerta se habría, las bisagras comenzaron a crujir y yo intente de no respirar, estába muy aterrada ¡y de pronto...

¿tienes miedo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora