seis

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--Me gusta, la flor es un lindo detalle. O podría llevar una servilleta o como se llame. --pronuncio el azabache --.

Freddy de encontraba dibujando los trajes de boda que le gustaría llevaran.

--Haha, bien. A mi también me gusta. --dijo con una sonrisa el castaño--.

Como ya era costumbre la luz entraba cálida por la ventana.
Iluminando el dibujo, los trazos de este, los delicados dedos de Freddy y el anillo de compromiso en estos.

Fred paseaba por el lugar con un vaso lleno de jugo de naranja, no quería estar ebrio ni oler a alcohol al ir a visitar a los padres de Freddy.

--Ire a ducharme. -- pronuncio el ojiazul --.

Freddy dejo todo lo que hacia, se levantó del banco de madera donde se encontraba, se acerco a su marido y beso su mejilla.

--Si, esta bien. -- dijo sin dejar de mira los dibujos que colgaban de la pared --.

El que mas resaltaba era ese oso negro que tanto le gustaba a Fred. No le quitaba la vista de encima. Entrar a la habitación y no mirarlo, era como no entrar.

--¡Viste te! -- Se escucho a lo lejos --.

--Sisi, ¡Ya voy! -- grito desde abajo el azabache --.

Fred subió las escaleras pensando que usar. La reservación estaba lista. No podía entrar al lugar con unos jeans y un camisa a cuadros roja. Por mas que quisiera.

La ropa era lo de menos. En ese momento había un sentimiento que rondaba en la casa.
Felicidad.

Cuanta felicidad sentían estos dos. Ninguno podía creerlo.
La sensación era nueva. Y les agradaba.

Mi cuaderno favorito (Freddedy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora