Estaba tan indefensa.
Había alcanzado mi límite máximo de exitación.
Por mis venas no corría sangre ; corría adrenalina.
Joder, la presión que ejercía sobre mi pelvis me volvía loca.
Me transformaba en un monstruo con ansias de comer.
Y yo, pues, no dudaba en comerme lo que por derecho me pertenecía : su cuerpo.
Hubo un parón, en el que sus palabras salían solas de su boca mientras me gimió:
- ¿Quieres más? - preguntó
Aquel momento sin pensarlo, no me detuve ni un segundo a pensar en mi respuesta mientras hacía movimientos circulares, haciéndome sudar calor, sin haber prendido el sol.
- Lo quiero todo - Le respondí al oído ; dámelo todo, como si mañana fuese el fin del mundo.
Me besó, tan intensamente, que mañana era otro día nuevo y podríamos volver a darnos calor como si al día siguiente fuera a pasar lo mismo.
Si mañana es el fin del mundo
Por favor ;
Mátame de amor y placer.
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A Flor De Piel.
PuisiRelatos cortos, expresados en poemas sobre los sentimientos de mi día a día, tan reales como la vida misma.