She got a...

Tercer Capítulo.

Hoy era sábado, por lo que podía estar en cama todo lo que quisiera, si no fuera por mi gran amiga Katherine que me llamó a mas 10 de la mañana y yo como tenía de tono a Suicide Silence me metí un susto de 3 pares de bueno... ya me entendéis y no faltó mi padre gritando que bajara esa música infernal, lo ignoré y conteste al teléfono.

*Llamada telefónica*

- Hola dormilona, ¿Quedamos a las 11 en el café de siempre? . -Dijo Kate tan alegre como siempre.

- Son las 10 de la mañana Katherine la gente duerme, y vale.- Dije con sueño

*Fin de la llamada*

Me puse los cascos, para no molestar a nadie, baje a la cocina me preparé un té y en eso apareció mi madre.

-Cariño, ¿a que no adivinas quien acaba de llamar?- Dijo ella contenta.

-Sorprenderme- Dije irónica.

-Te pasas, es tu hermano !viene a visitarnos!- Dijo mi madre contenta.

No os hablé de mi hermano pero el es el genio de la familia a donde voy siempre de comparan con él, es muy irritante, está estudiando ingeniería mecánica en los Países Vajos, lo que me alegra porque ya no está es casa.

Me fui a mi habitación preparé mi ropa, una sudadera gris que ponía "Miau" unos pantalones negros, unas botas. Hice mis necesidades me duche y me vestí.

-MAMÁ ME VOY- Le dije a mi madre gritando mientas cojia las llaves.

-VALE, TEN CUIDADO- Respondió.

Salí directa a la cafetería y allí estaba Kate con un vestido de flores y unos tacones.

Me senté en una silla cerca de la suya.

-¿Que querías contarme? - Dije impulsiva.

-Ayer fui a comprar y me trompezé con un chico en el Centro comercial, me invitó a tomar un café, me dijo que iba a ir a una fiesta mañana y si quería acompañarle, le dije que si pero no quiero ir sola ¿vienes?- Dijo contenta, bueno se le nota que ese chico le gusta, aunque Kate ya ha tenido miles de novios.

-Emm vale, ¿En donde es?- Dije.

-Es cerca de mi casa, ven a las 7 y nos preparamos- Dijo.

Y en eso suena mi móvil lo miro y es un mensaje de mi madre.

*Mensaje*

Hija, ven a casa a ayudarme a prepararlo todo para cuando llegue tu hermano.

-Vale, pero me tengo que ir, hoy va a venir mi hermano y esta como loca- Dije Kate asintió y me fui aunque Kate se quedó allí tomando su café.

Llegué a casa y mi madre estaba haciendo la comida y mi padre en el salón me dirigí a la cocina junto a mi madre, me senté en una silla y la ayudé a poner la mesa y en eso alguien toca el timbre.

-Ve a abrir- Dijo mi madre.

Abrí y allí estaba mi hermano un hombre alto pelo marrón revuelto vestido con un traje negro.

-Hola Cassandra, que guapa estás- Dijo pasando mientas mi madre y mi padre lo saludaban, nos sentamos a comer.

-Bueno Sidney, cuentanos ¿que tal?- Dijo mi padre.

-Genial padre, os tenía que comentar que mañana hay un reunión para los ex-alumnos, nos quedaríamos allí unos días el hotel está incluido- Dijo mi hermano serio.

- ¡Estupendo! Sería genial ¿Verdad?- Dijo mi madre con complejo de Effie Trinket.

¡Perfecto! Actuaría como si estuviera entusiasmada y mágicamente me pondré enferma y asi podré ir a la fiesta con  Kate.

Mi madre me obligó a ir a mirar vestidos que tenía en mi armario, aunque no me ponía ninguno m

-Mira este que bonito- Dijo señalando a uno rojo del armario.

-!Sí!- Dije y después mientas mi madre no miraba contení la respiración y así me podría pálida.

-¿Te encuentras bien? Iré a por el termómetro- Dijo bajando las escaleras.

Mi madre bajo a por el termómetro y me piso el termómetro y yo lo puse el lado de la bombilla para que pensara que tenía fiebre.

- ¡40 de fiebre! !Dios mio! Ni de broma vas a la fiesta, te quedas aquí- Dijo alarmada.

Mi madre fue a avisar a mi padre y a mi hermano a los que no le importó mucho. -Nos iremos a preparar, tu te quedarás sola la vecina vendrá a verte por si acaso- Dijo mi padre serio.

Mis padres tardaron en prepararse como cien mil años mientas que mi hermano se quedó conmigo en el salón ya que el ya que el lo tenía todo preparado.

Comimos todos, después mi madre me daba indicaciones sobre lo que hacer y mi padre fue a hablar con la vecina, que de eso ya me encargaría antes de eso.

-Bueno cariño ya nos vamos- Dijo mi madre dándome un abrazo.

-Portate bien- Dijo mi padre.

-No hagas muchas fiestas- Dijo mi hermano en un susurro mientas me abrazaba.

De mi vecina no me preocupaba porque no vendría ya que sabe que estoy fingiendo.

Como no tenía hambre me puse a ver 'En llamas' una de las películas de mi trilogía favorita.