Daños pasados «J Balvin»

Capitulo 19

Maddie

Luego de que Jose me llevara a desayunar, por fin vamos a casa de la abuela, no puedo con la emoción, podré abrazarla, me podrá dar de su tarta de manzana que tanto comía cuando era pequeña

–Llegamos–aparca el auto

Observo la casa café claro, tiene una pérgola con sofás rojo vino y una mesita café, con un florero en el centro, la colonia es privada y muy segura por lo que puede dejar eso con seguridad, también estaba su auto estacionado

Bajamos del auto, toma mi mano y caminamos hacia la puerta, tocamos el timbre y unos dos minutos después la abuela abre

–¡Maddie!–me abraza fuertemente al igual que yo

–Te extrañe mucho abuelita–mi voz suena entrecortada y las lagrimas empañan mis ojos

–Yo también amor–nos separamos–¿Quien es el?

–El es Jose, mi novio–se dan un pequeño abrazo

–Encantado señora–le dice Jose

–Oh cariño no me digas señora, dime abuela–lo mira tiernamente–pero pasemos

Entramos a la casa, la sala también es café al igual que lo que se alcanza a ver de la casa, pero los muebles son blancos y los sofás rosa

–¿Quieren algo de tomar? Tengo jugo de arándanos–me dice, sabe que es mi jugo favorito

–Me encantaría–sonrío

–A mi igual–dice Jose

Va a la cocina y minutos después sale con dos vasos en sus manos, comenzamos a hablar, acerca de como me a ido en el trabajo y todo eso, de pronto el llanto de un bebé nos interrumpe, la abuela se para rápidamente y luego regresa con un pequeño rubio en sus brazos, lo reconozco inmediatamente por las fotos que Carlos mi primo a puesto de su pequeño hijo de 8 meses "Sebastián"

–Ya cariño–acaricia la cabeza del bebé–me dejaron a cargo de el–explica

–Oh–me levanto para tomar a Sebastián–Hola amor, soy tu tía

Me siento de nuevo con el bebé en mis piernas, Jose se acerca para acariciar su mejilla, la abuela me entrega el biberón de Sebastián, lo coloco en su pequeña boca y el comienza a beberlo desesperadamente mientras juega con los dedos de Jose y este lo ve con ternura

Conversamos otro rato más, llega la hora de la comida, saca la lasaña que tenía en el horno y sirve en los platos

–Te quedarás aquí ¿no? Por que en una hora tengo que ir a la sesión de fotos–caminamos hacia la mesa

–Si, me quedaré–asiente

–Paso por ti cuando termine

–Bueno

Nos sentamos en la mesa, la abuela deja los platos con comida frente a nosotros y las bebidas también, pone frente al pequeño una papilla de manzana, me ofrezco a dársela, Jose y la abuela hablan, Jose le cuenta a que se dedica y la abuela lo escucha atentamente, al parecer se agradaron

–Disculpe, debo contestar–dice Jose

«Si, en unos minutos, ya la llevo, si en muy poco estoy allá»

–Me tengo que ir–se para de su asiento–vuelvo en la noche

Se despide de ambas y se va, la abuela me ve con una ceja alzada, conociéndola lo más seguro es que quiere que le cuente como conocí a Jose, pero no quiero decirlo, ella ya sabe esa historia, pero no sabe que ese Jose, es este Jose