La chica del cabello de oro

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Yoona observo por un momento a aquella rubia angelical. Definitivamente Solar no solo era bonita, era también todo un torbellino de energía. 

Solar: ¡Vaya!!, veo que vienes muy bien acompañado Bo Gummie. Porque no me siguen.

Solar los condujo a otra área de la cafetería y los invito a acomodarse en una linda mesa junto a un ventanal enorme. La chica se presento como la dueña y chef principal de ese lugar añadiendo que era considerada como una de las mejores chocolateras de todo Corea.

Yoona estaba completamente atenta a cada palabra de aquel pequeño bólido de energía.

Solar: Tal vez no tenga el toque de Bo Gum, pero créeme... definitivamente puedo también sacarle suspiros a las chicas lindas.

Yoona la miró desconcertada, mientras Solar le guiñaba el ojo.

Solar: ¡¡Ah!! ¿No lo sabías? Park Bo Gum y yo estudiamos juntos repostería en Francia mientras estaba viviendo allá, tal vez para el solo fue un pasatiempo pero definitivamente a mi se me fue la vida en ello. A pesar de eso el siempre estaba arriba de mi en todas las clases lo que al principio me hizo detestarlo pero definitivamente después de trabajar en un proyecto juntos y haber tenido la oportunidad de conocernos mejor, con el tiempo terminamos siendo los mejores amigos, aunque aún hoy en día intento superarlo.

La rubia codeo al chico que sonreía levemente y se dirigió hacia el mostrador diciéndoles que tenía algo que sabía que iban a disfrutar.

Yoona estaba observando cuidadosamente el lugar, era lindo y cálido, con una decoración vintage. 

Cuando Solar regreso comenzó a colocar algunas cosas sobre la mesita para después traer dos rebanadas de algún postre para ellos que puso sobre la mesa con mucho cuidado. Se trataba ni mas ni menos que de una rebanada de pastel de vainilla con fresas encima y una lamina de chocolate como decoración para la linda Yoona y un pay de queso con frutos rojos encima espolvoreado con algo de azúcar para Bo Gum.

Solar: ¿Sabes?... lo peor de este tonto, es que hace unos postres espectaculares y aún así no es fanático de los dulces. Les acerco dos tazas de café humeante y una pequeña barra de chocolate que termino por poner frente a Bo Gum.

Solar: Chocolate amargo, tu preferido darling.

La rubia sonrió mientras daba una pequeña caricia al cabello de Yoona lo que llego a aturdir a esta última para después desaparecer adentrándose en la cocina.

Yoona: Así que... ¿eres un chef?

Bo Gum: No precisamente, y dime, ¿qué te parece?

Yoona había tomado el primer bocado de ese delicioso pastel de vainilla cuando sintió un festín de sabores en su boca que no podía describir claramente, pero definitivamente era el mejor pastel de vainilla que había probado hasta ahora.

Bo Gum sonrió al ver como Yoona por fin desde que la conoció había sonreído frente a el moviéndose alegremente de un lado a otro lo que lo hizo suponer se debía al delicioso pastel que Solar había hecho.

Mientras Yoona se balanceaba alegremente  pudo ver como Bo Gum de pronto comenzó a colocar las pocas fresas que tenía sobre su pay en el plato de ella y lo volteo a ver seriamente mientras aún tenía el tenedor en su boca.

Bo Gum: Te gustan las fresas ¿no es así?

Yoona asintió tímidamente. El chico solo siguió sonriéndole mientras terminaba de colocar una última fresa sobre su plato.

Cuando habían terminado su rico tentempié, Bo Gum le menciono que tal vez era buena idea ir a otro lugar, lo que hizo que Yoona se percatara de la fila enorme que se había formado afuera del local. Definitivamente el lugar era tan bueno que mucha gente hacía filas infinitas todos los días para probar las creaciones de Solar.

¿COMPROMISO O SACRIFICIO?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora