Capítulo 2

103 8 1
                                    

Appa: T/N, mi cielo. Ese lugar no es para ti -dijo sollozando mientras me observaba fijamente-

T/N: Appa, el hecho que sea chica no significa que no pueda ir ahí -dije tratando de hacerlo recapacitar-

Appa: Lo que menos quiero es que alguno de mis niños se vallan a ese horrible lugar -dijo agachando la cabeza-

T/N: Vamos Appa, ambos sabemos que si nuestro pequeño Dae-Hyun va a ese lugar no regresara y si lo hace no será bien -dije con la intención de hacerlo reaccionar-

Appa: Sí pequeña pero si tu vas será mucho peor -dice nuevamente- Tu hermano es fuerte, él podrá hacerlo bien y sé que se va a desempeñar muy bien ahí -dijo queriendo hacerme cambiar de opinión-

T/N: Appa, iré yo y nadie lo va a cambiar, es mi decisión. Saldré de casa mañana por la noche y quiero que le mientas a Dae-Hyun y a mi Omma -dije tomando sus mejillas entre mis manos- Quiero les digas que del trabajo me enviaron a Francia. Que era algo muy importante y tuve que salir sin avisar pero como tu estabas despierto, aprovechaste para llevarme al aeropuerto -dije soltándole para luego mirar hacía al frente-

Appa: T/N, no puedo mentirles... -dijo frustrado-

T/N: Appa, debes hacerlo. Piensa en el bien del pequeño Dae-Hyun -dije seriamente-

Appa: Esta bien nena -dijo limpiándose las lagrimas para volver a arrancar el auto-

T/N: Gracias Appa -dije volteando hacia a la ventana para dejar salir mis lagrimas, ya me había contenido demasiado-

Lo poco que hacía falta para llegar hubo un silencio que invadía cada rincón del auto, ninguno decía ni una sola palabra. Era frustrante para él, saber que su hija dentro de unas horas se iría lejos, saber que quizás no comería e incluso no dormiría. Pero al menos yo pensaba que estando en casa, no comería, ni dormiría sintiendo la culpa de dejar que mi hermano menor, tan frágil iría a ese lugar y quizás nunca más lo volvería a ver. Luego de unos minutos, el auto se detuvo frente a la empresa donde trabajaba yo.

T/N: Hasta luego Appa -dije acercándome a él para abrazarlo fuertemente- Te Amo -dije nuevamente para besar su mejilla-

Appa: Yo también Te Amo mi cielo -dijo una sonrisa llena de tristeza-

T/N: No te preocupes Appa, veras que todo saldrá bien -dije sonriendo para luego bajar del auto y dirigirme hacia la empresa-

Dentro de esta, me dirigí a la oficina de mi jefe. Ya que debía renunciar a mi trabajo, no me iría de ahí sin dar una explicación o al menos una mentira. Antes de ir a esta, decidí pasar por mí oficina recogiendo los últimos documentos que debía entregar. Los tomé, salí de ahí y caminé hasta llegar a la oficina de mi jefe.

T/N: -hice referencia- Hola Señor Lee ¿Podríamos hablar un momento? -pregunte totalmente sería haciendo que el sospechara que algo no andaba bien-

Señor Lee: Claro T/N, pasa y toma asiento -dijo apoyando sus codos sobre el escritorio y observaba con detalle mis acciones- ¿Qué sucede? -preguntó viendome fijamente a los ojos-

T/N: Y-yo... Vengo a pedir la renuncia. Realmente le agradezco todo lo que ha hecho por mí pero me temo que debo dejar mi empleo -dije agachando la cabeza-

Señor Lee: ¿A qué se debe que quieras dejar tu empleo T/N? -preguntó con un tono firme y serio-

T/N:  Me gustaría cumplir con el servicio militar, aunque se sabe que no es algo obligatorio para las mujeres quisiera yo ir a enorgullecer mi patria -dije levantando la vista para encontrarme con sus ojos-

Señor Lee:  En este país necesitamos más chicas como usted T/N pero me parece que usted es muy necesaria en el puesto que lleva. Recuerda que su buena forma de trabajar la ha llevado a ser la empleada del mes 7 veces consecutivas y este mes cumpliría el récord de 8 veces. No creo que sea buena idea, su pensamiento es bueno no lo niego pero... ¿No cree que dejara mucho atrás si va a ese lugar? -preguntó algo triste o al menos fue lo que note yo en su voz y en su mirada-

T/N:  ¡Claro que sí! Pero son cosas que quizás pueda recuperar cuando regrese. Como dije antes: Lo siento mucho, realmente espero que encuentre a alguien incluso mejor que yo -dije levantándome del asiento- Por cierto -saque dos papeles con cosas escritas, uno era más pequeño que el otro pero ambos contenían cosas importantes- El pequeño lleva una cuenta bancaria, mi última paga debe ir a esa cuenta y el otro me gustaría que tomase el tiempo de  leerlo. Es algo que nunca pude decirle en su cara -dije para luego caminar fuera de ese lugar, lento pero seguro-

Fuera de mi anterior empleo, caminé hacia una heladería que había cerca del lugar. Frente al mostrador pedí un helado, mi favorito, ese de chocolate que tanto amaba, lo pagué y saliendo de ahí comencé a hablar conmigo misma mientras caminaba sin rumbo. Amaba las calles de Busan, era hermoso caminar por ahí, al menos a mí a diferencia de mi hermano menor me encanta andar por ahí.

             9 horas después

Ya me había cansado de andar por ahí sin nada que hacer, aún seguía hablando sola. Parecía demente pero era yo, no estaba pensando en lo que sucedía a mi alrededor.

T/N: ¿Y bien Yeontan? ¿Qué tal te fue hoy? -pregunte a uno de mis excompañeros-

Yeontan: Como siempre pero no me quejo, al menos ganó lo suficiente para mantener a mis hijos y llevarle alguno que otro regalo a mi esposa. ¿Y tú? ¿Qué te sucedió? Todos hablaban de ti. Porque entraste y saliste de la oficina del jefe. ¿Qué te sucedió? -preguntó curioso sin entender nada-

T/N: Me iré al Servicio Militar -dije soltando un suspiro-

Yeontan:  Oh ya -suspiro- Espera ¿Qué? -gritó levantándose de un brinco-

The Only Exception. /Imagina con Suga/ (TERMINADA) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora