prólogo

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No podía creer la manera tan despiadada en la que asesinaba a su propio maestro, sus ojos se volvieron más negros de lo común y se podía ver en ellos el reflejo de su víctima totalmente horrorizada y suplicando por su vida.

El  aun estaba escondido suplicando por no ser encontrado por aquel ser despiadado que se encontraba frente a sus ojos, pero estaba tan sumergido en sus pensamientos que no se dió cuenta cuando la silueta del asesino  ya no estaba en aquel lugar. Con su corazón acelerado y su cuerpo temblando del nerviosismo decidió salir, sin embargo un escalofrío recorrió su columna vertebral cuando sintió una respiración pesada en su nuca, sus ojos se cristalizaron rápidamente pensando en que ese era su final y miles de ideas recorrieron su mente con tan solo pensar lo que ese desgraciado le haría.

ー Hola lindura ー Su tono de voz era más grave de lo normal e incluso aunque el más bajo no podía verlo, sabía que una sonrisa se había formado en su rostro.

ー No tienes derecho a llamarme así ¿Quien te crees?ー Paso saliva por su garganta apretando los puños a cada uno de sus costados, como quería darle un buen pucho para borrarle esa estúpida sonrisa pero ya estaba metido en demasiados problemas como para cagarla más.

ー Oh vamos, sé que te encanta. ¿Así no es como te llaman los idiotas con los que te acuestas? ー Soltó una estruendosa risa para luego morder su labio inferior viendo como el más bajo temblaba ー Ah Jiminie, Jiminie, Jiminie. ¿Porqué no solo te rindes y aceptas que estás perdido? ー Chasqueó su lengua mientras se acomodaba en frente de el chico y posaba sus dedos en el mentón de este apretándolo un poco ー Rehusarse nunca es bueno, puedes venir a mis brazos o joderte más de lo que ya estás. Estas perdiendo lo poco que tenías ー Acercó sus labios a los del contrario pensando en que le correspondería por el estado en el que estaba, pero lo único que recibió fue una patada en la entrepierna causando que cayera al suelo y suelte una maldición.

ー ¡Eres un idiota! ¿Crees que después de lo que has hecho querré estar cerca de ti? Si que eres imbécil ー Lo miro con todo el odio que podía existir en el mundo y tomó la oportunidad para escupir la cara del mayor ー ¡Vete al infierno! ー Sin más salió corriendo del lugar, su vida estaba colgando de un hilo, y ese hilo lo sostenía nada más ni nada menos, aquel chico del que había salido corriendo hace unos segundos.

Que Empiece El Juego  [yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora