Jaque Mate

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Nunca antes entendía al mundo de esa manera, yo siempre creí que todos eramos piezas en el juego de alguien mas, pero la verdad es que en nuestra vida nos encontramos siempre en juego contra nosotros mismos y no contra los demás, somos nosotros los encargados de crecer y de mover las piezas en nuestra vida.

–Ahora si puedes seguir solo.–
–Yo–¡Muchas Gracias por enseñarme!
–Sabes que no fue nada.–
–Yo–Pero...¿Exactamente quien eres?.– le pregunté por curiosidad
–Ya que aun no te diste cuenta te lo explicaré.–
–Yo– Entonces dime
–Soy tú, pero el tú que se creía un demonio

Estaba asustado, después de que me reveló la verdad la pulsera de flores en mi mano empezó a brillar, y ese ser que decía ser yo empezó también a desaparecer.

–No tengas miedo, ahora ya sabes la verdad sobre tu juego de ajedrez.– me decía en sus últimas palabras antes de desvanecerse en el aire.– Yo nunca volveré a atormentarte en tu vida.– dijo y finalmente desapareció.

La pulsera de flores que estaba brillando también empezaba a desaparecer, de esta me di cuenta de algo, cada color representaba algo de mi verdadera personalidad. El morado de el ángel representaba mi verdadera alegría a pesar de que sé que todo va a terminar mal. El azul del mar de estrellas demostraba que puedo divertirme a pesar de que todo sea anormal. El negro del circo, simbolizaba mi desesperación que como ser humano puedo llegar a tener. Y el color rojo de la ciudad oscura, representaba el alejarme del pasado, pero no de mi mismo pasado, sino del pasado que los demás escogieron para mi. Ahora sé que soy dueño de mi propio presente y quien decide mi vida soy yo mismo.

Después de todos esos sueños, entendí que la vida si es igual a un juego de ajedrez, pero las personas no somos las piezas en ese juego, sino las encargadas de hacerlas que se muevan a nuestro favor.

Desde ese momento mi vida se iba a volver diferente. Mis padres llegaron de su viaje y aunque al principio se asustaron mucho de verme que era alguien diferente, después entendieron que lo que creyeron por muchos años de mi, no era cierto.

En la escuela empecé a relacionarme mas con el resto, ahora tengo amigos, claro también enemigos pero esto es algo que en la vida no se puede evitar , igual que en el ajedrez existen piezas blancas y existen piezas negras.

De nosotros mismos es lo único que depende que podamos lograr nuestros objetivos. La vida se vuelve un infierno cuando tratamos de ser alguien que no somos, en este mundo si no estamos dispuestos a jugar no vivimos. Vivir la rutina es siempre cansado pero ya que somos dueños de nuestro destino nosotros decidimos si queremos un destino triunfal o un destino cruel pero claro también debemos actuar para que suceda, debemos ajustar el camino que elijamos a nuestro propio ideal.

Así es como salimos libres de un juego cruel, sin saber que nos espera en el futuro, y sabiendo que hasta perder es ganar, pues perdemos simplemente una partida pero eso nos da la experiencia para no volver a cometer los mismos errores. Solo debemos de disfrutar del juego pues nosotros mismos decidimos que pieza mover y el preocuparse demasiado tampoco soluciona nada, por eso debemos de vivir cada momento pues esto hace que a nuestras metas podamos hacerles Jaque mate.

Fin.

¿Como escapar de un juego de ajedrez cruel?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora