Capitulo 26

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Narra Sebastian

Cuando le dije esa frase la besé como hace meses hubiera hecho, deseaba tanto sus labios que me es incontrolable, las ganas que solo ella me da, la fui metiendo a la ducha sin parar de besarnos, y yo sin dejar mis manos quietas, estas recorren todo su cuerpo y mientras le iba quitando prenda por prenda ella hacia lo mismo conmigo.

   -Sebastian, estamos en la casa de Zac... - dijo ella quitándome el pantalón.

   -Ahora mismo solo quiero hacerte mía – dije tomándola en mis brazos para meternos en la ducha.

   -Pero ¿y si nos escuchan? – dijo ella entremedio de un jadeo.

   -Pues que nos escuchen y así se dan cuenta de que hasta en eso soy bueno – dije.

   -Me encanta cuando te pones así... y dices tonterías – dijo ella bajando sus manos hasta mi trasero.

   - ¿Sí? ¿y también cuando hago esto? – dije y le mordí uno de sus pechos y con mi mano le tocaba el trasero, ella gimió en mi oído.

   -Sebastian... hazme tuya – dijo ella entre jadeos.

   -Es lo que siempre quise oír – dije y en ese momento la penetré como nunca antes lo había hecho.

Sus gemidos y los míos llenaron aquella ducha, mis embestidas cada vez eran mas fuertes hasta que juntos llegamos al orgasmo con un gran grito y ella se recostó en mi hombro.

   -Te amo – dije levantándola un poco para salir de ella.

   -Yo más mi amor – dijo ella dándome un tierno beso – creo que deberíamos ducharnos, ahora sí.

   -De acuerdo – dije ya con el shampoo en la cabeza.

Terminamos de bañarnos y salimos con unas toallas que había, yo con mi toalla en mi cintura y ella en todo su cuerpo. Una vez en la habitación de Zac me deshice de la toalla...

   - ¡Por dios tápate! – dijo ella tapándose los ojos.

   - ¿Algún problema? – dije pegándome a ella y rozándole mi miembro por encima de su toalla.

   -Sebastian... ya cámbiate – dijo ella nerviosa.

   -Cariño, se que te encanta, hace unos minutos me dijiste "hazme tuya", te encanta tanto que me pedías más y te encanta tanto que gritabas mi nombre en la ducha – dije serio.

   -Si, pero... - la interrumpo.

   -Y, además, se llama Bucky – dije señalando mi miembro.

   - ¿Le has puesto nombre? Y Bucky... - dijo ella.

   -Pues sí, es grande y fuerte como el soldado de invierno – le dije y pude ver que estaba aguantando la risa – admítelo, te gusta.

   -Tienes razón, me encanta y mucho – dijo ella levantando los brazos.

   - ¿Te encanta? – pregunte.

   -Me encanta mucho... Bucky – dijo ella dándome un pequeño beso.

   -Así me gusta, voy a vestirme – dije yéndome y poniéndome mi bóxer.

   -Espera ¿me vas a dejar así? – dijo ella gritando.

   -Puedo y lo haré... cariño cámbiate rápido, te espero abajo – dije saliendo de la habitación ya vestido.

Llegue a la sala y ya todo estaba limpio busco por todos lados hasta que escucho aplausos que vienen detrás de mí.

   -Hasta que por fin bajaste ¿Dónde esta Valerie? – dijo Brant enojado.

   -Se está cambiando – respondí.

   - ¡Sebastian! No me digas que tuvisteis sexo en mi cama... - dijo Zac molesto.

   -No, no que va – y me miraron con cara de "¿Enserio?".

   -Dejad de interrogarle y no Zac no lo hicimos en tu cama – dijo Valerie bajando las escaleras ya vestida.

   -Bien, con eso me conformo – dijo Zac y Brant.

   - ¿Y los demás? – pregunte ya que no veía a nadie más.

   -Salieron a... no sé dónde, pero se fueron, y se cansaron de esperar a Valerie – dijo Eddie saliendo de la cocina.

   -Bueno, creo que yo también debería irme – dijo Valerie y yo la agarre de la mano.

   -No mi amor, quédate conmigo – le dije.

   -Pero hay muchos hombres – dijo ella como una niña pequeña.

   -Valerie uno de ellos soy yo, tu hermano, esta Zac tu mejor amigo, y esta Sebastian tu novio, el único que no conoces aquí es a Eddie, pero él no te hará nada – dijo Brant.

   -Esta bien me quedo, pero solo para vigilarte Sebastian – dijo apuntándome a lo que yo le dé un beso.

Estuvimos en la sala charlando, le hacían preguntas a Eddie mientras Valerie estaba tumbada en mis piernas y yo le acariciaba el cabello.

   - ¿Tienes novia Eddie? – pregunto Zac.

   -No... se puede decir que espero a la chica ideal, a la chica perfecta para mí – dijo mientras miraba fijamente a Valerie, claramente era una indirecta.

   -Si, eso es lo que todo el mundo busca, por suerte yo pillé mi chica ideal – dije mirándolo y lanzándole ahora yo la indirecta, él me miro mal.

   -Y tú eres mi chico ideal Sebastian – dijo ella dándome un beso y Eddie giro la mirada...

Narra Valerie

¿Es cosa mía o Sebastian y Eddie se lanzan indirectas?... bueno luego del beso hablo Eddie cortándolo.

   -Bueno, yo ya me voy... adiós – dijo levantándose.

   - ¿Cuándo nos volvemos a ver? – le pregunto mi hermano.

   -Escríbeme y listo, un placer volver a veros – dijo Eddie refiriéndose a mi hermano y a Zac.

   -Igualmente – dijeron los dos.

   -Un placer conocerte preciosa – dijo dándome un beso en la mejilla y Sebastian le puso mala cara.

   -Adiós Eddie – dije nerviosa.

   -Un placer conocerlo señor Stan, siendo el pad... novio de Valerie es un honor – dijo como un triunfo y extendiéndole la mano.

   -Si, niño adiós – dijo Sebastian volcándole la cara, el lo miro bufo y se fue a los minutos todos estaban callados, luego Sebastian se levantó.

   -Brant, Zac me voy nos vemos otro día – dijo él y salió muy enfadado.

   -Valerie, parece que Sebastian también se dio cuenta de las indirectas que Eddie te tiraba – dijo Brant.

   -Creo que todos nos dimos cuenta – dije yo cabizbaja.

   -Si, pero Eddie es buena gente no creo que quiera nada, él sabe respetar Valerie lo conozco de hace mucho tiempo – dijo Zac.

   -Bueno chicos, yo me voy ¡adiós! – dije eso y salí directa a casa.

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