11. Cuando lo inevitable llega 2

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Escuchen la canción desde que empiece este capítulo y no me hago responsable de algún trauma, gracias<333

Parte 2/2

Y ahí estaba yo.

Con ropa negra y vacía.

Vacía, congelada, fría y desesperada.

No podía aceptarlo.

<<Es solo un sueño>> pensé.

-Los sueños son pesadillas también.- alguien susurró y miré hacia ambos lados asustada.

Estaba rodeada de personas llorando, gritando y soltando todo el dolor por medio de lágrimas. Otras, no tenían ninguna expresión, ninguna lágrima, ni rastro de llanto...mientras que yo, sentía que moría.

¿Alguna vez sintieron como algo se moría, interiormente, cuando se enteraban de algo?

Bueno, de esa manera me sentía, pero muerta y vacía completamente.

Cada respiración que daba, era una puñalada en el alma. Quería pensar que estaba en un mundo paralelo en donde yo me había infiltrado sin razón alguna, pero no.

Era la realidad.

Estaba el gran cajón blanco al frente mío y no podía creerlo. No podía creer que adentro de ese cajón, estaba el cuerpo de alguien al cual quise mucho durante poco tiempo y no, no como amiga.

Estaba muerto.

Estábamos muertos.

Él, físicamente, encerrado en el mueble de madera.

Y yo, muerta en vida.

-¿Camila?- escuché mi nombre y una señora llorando, se me acercó.

-¿Sí?- pregunté.-¿Necesita algo?- le hablé delicadamente.

-Esto es para tí.- me extendió un sobre con mi nombre en él. Era gris y la letra la podía reconocer fácilmente.

-Gracias.- intenté sonreír, pero las lágrimas cayeron de a poco. Tomé el sobre y la señora se alejó, era evidente que era la mamá del Joaquín.

Me quedé mirando un buen rato el sobre y su letra. Inmediatamente, lo imaginé escribiendo mi nombre en el papel con la lápicera que solía usar.

<<Tan joven y muerto>> volví a pensar.

De la nada, me dio un frío en la espalda y sentí que alguien me miraba. Levanté mi cabeza, hacia el cajón y lo vi.

¡Estaba ahí!

Miré hacia todos lados viendo si alguien notaba su presencia, pero nadie se daba cuenta de él. Estaba al frente de su propio cajón y veía como me sonreía a mí, solo a mí.

Desde que te fuiste...[CHILENSIS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora