Capitulo 3

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Eran casi las dos de la mañana y Loki no podía dejar de dar vueltas en la cama, no lograba consiliar el sueño. Se levantó de su cama y abrió la ventana para luego recargar su codos sobre ésta. El clima era bastante fresco, pero agradable, no llegaba al punto de que le diera frío. Casi no había personas en las calles, sólo uno que otro auto que se diría a alguna parte con bastante calma.

Dió un suspiro algo cansado, pero a pesar de que si tenía sueño, no conseguía dormir. Admitía que el estár pensando e intentando recordar a aquel muchacho le hacía perder el sueño y llenaba por completo su mente. Dejó la ventana entre abierta y regresó a su cama para seguir tratando de conseguir lo que quería, y así lo hizo, después de un buen rato y unas, tal vez, dos hora logró descansar.

A la mañana siguiente que se despertó, escuchó su celular sonar una cancioncilla que le gustaba y había puesto como despertador, pero lo que no entendía, era el por qué ponía esa alarma si ni siquiera salía de su hogar o tenía prisa por algún deber pendiente.

Se levantó de su cama y entró al baño para luego quitar toda su ropa y tomar una ducha, al cabo de unos minutos, terminó y se colocó una toalla alrededor de la cadera y secó su cabello con otra un poco mas pequeña. Se vistió y revisó la hora en su celular, eran las 11:36 de la mañana, dejó escapar un suspiro y dejó el movil a un lado.

Bajó las escaleras hacia la cocina y preparó un café, amaba el café o cualquier bebida caliente, le hacía poder estár relajado. Caminó hacia la sala de estar y encendió el estereo para poder escuchar algo de musica, no sabía por qué, pero se sentía un poco alegre ese día, era agradable, pero no como para salir de su hogar.

Dirigió su mirada hacia la puerta y vió la dichosa carta que, honestamente, ya esperaba. Corrió hacia ella y la tomó en sus manos, ésta vez el sobre era de un leve color verde. La abrió e inmediatamente comenzó a leerla.

  Hola Loki!
Buen día, ¿pudiste dormir bien
anoche? Tal vez no, estuve cerca de tu
casa anoche y pude ver la luz encendida,
no, no soy un acosador si es lo que
posiblemente pensaste.
Bueno, la razón por la que te escribo
ahora, es por que quiero saber si te puedes
acordar de aquella vez que, una semana
después de que ingrsaras al colegio
te ayudaba con tus apuntes.
Honestamente me agradaba hacerlo,
ya que así podiamos pasar un poco de
tiempo juntos, aun que casi nunca
se nos daba la oportunidad de hablar sobre
nosotros. Adoraba el poder verte, cabe decir
que una de las cosas que mas me gusta
son tus ojos, esos bellos ojos color
esmeralda que le prestaban más atención
a las palabras escritas en el papel,
que a mi, pero eso no importaba, quiero
hacer que recuerdes a la tonta persona
que se la pasaba admirandote
todos los días.

  Estaba confundido, si, lo estaba, no podía recordar absolutamente nada de él. Si recordaba que el rubio lo ayudaba con varios apuntes, pero Loki sólo se centraba en lo que estaba escrito y nunca pudo ver el rostro del mayor, aun que éste estuviese justo frente a él.

Comenzaba a sentirse mal al no poder recordar si quiera el color de los ojos de aquel chico dueño de las cartas que sin falta a la misma hora llegaban a su puerta. Se estaba desesperando un poco, sólo un poco.

Carta tras Carta (ThorKi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora