"Who are you?"
A-ah~, ah~, mm~, oh dios...
-seguí moviendo mis caderas, embistiendo cada vez mas fuerte a la chica debajo mío, podía sentir como sus uñas se enterraban en mi espalda, sus piernas enroyándose en mis cintura. Me ergui y tome su cadera haciendo más certeras las embestidas.- Ah~, mm~, s-sigue... Ah~. - Y justo después de darle una fuerte nalgada me corrí en el condón. Pegué mi cuerpo lo mas que pude al suyo para comenzar a moverme levemente. Al salir de ella quite el condón y lo arrojé a la basura, me acosté a su lado encendiendo un cigarrillo y fumarlo.- Lo haces tan bien, Min... -la miré de reojo y me levante al ver que se acercaba.- ¿A dónde vas?-Al baño.
Entré al baño y me di una ducha una vez que acabe mi cigarro y puse seguro a la puerta. Todas las noches era lo mismo, follar con quien sea, hombres, mujeres, ya no importaba. Solo iba a los antros, bares y me los llevaba de ahí para ir a un hotel, justo donde me encuentro ahora.
Al terminar puse una toalla alrededor de mi cintura, y al salir del baño me encontré con la tipa aún desnuda y abierta de piernas.-¿Otra ronda?
fruncí mi ceño y gruñi. Esta perra creé que me la tomaré enserio.
-No, debo irme. Ya es tarde.
-Oh, pero... -Levante mi mano haciendo un "Cht" que hizo que se callará.
-Te seré sincero, solo estas aquí por que quise follar, no por otra cosa. Así que si piensas y creés que me quedaría para abrazarte y amarte, dejame decirte que no.
Jamás estaría con alguien como tú.No dije nada más, tome mi ropa y me vestí, claro, nunca se callo, comenzó a gritarme y lo de siempre. "¡¿Como puedes ser tan imbécil?!" "¡¿Acaso no te escuchas?!" "¡Eres un idiota!".
Al terminar de vestirme, tiré unos cuantos billetes a su lado.-¡No soy una puta para que me tires dinero!
-Jamás dije eso, aunque no éstas lejos de serlo. Es para que pagues el hospedaje y llames a un taxi.
Salí azotando la puerta escuchando un " ¡Me las pagarás, Min!". Yo solo Sonreí.
{...}
-¿Yoon?
-Adelanté. -La puerta se abrió dejando ver a mi querido amigo y socio.- ¿Sucede algo Nam? -Volví mi vista al computador y demás papeles que tenía.
-Solo venía acordarte de la cena donde asistirán todos los asociados.
-Si, no te preocupes, lo tengo en mente.
-De cualquier forma pasaré por ti.
-¿A que hora era?
-A las 8:00 p.m. en punto.
-De acuerdo, pasa por mi a las 7:00.
-De acuerdo, no se te vaya a olvidar y lleguemos tarde por tu culpa.
-No pasará.
-Si, eso dijiste hace tres meses y llegamos una hora tarde. -No pude evitar soltar una carcajada que resonó por toda mi oficina. Aún no puedo creer que Nam no a podido olvidar esa vez. Si era cierto que gracias a mi llegamos tarde a esa cena.- No le veo lo gracioso, Min. -Miré que se cruzo de brazos mirandome serio. Carraspee mi garganta.
-Lo siento, pero te aseguro que no volverá a pasar.
-Eso espero.
Sin decir más, se fue y con un poco de fuerza azoto mi puerta. Solté una pequeña risa al recordar aquello.
{...}
Eran ya las 7:00.
Me encontraba afuera de mi casa esperando al idiota de Nam, hasta que a lo lejos divisé a una camioneta negra, gracias al cielo este idiota llegó.-Sube. -Ordenó al momento de abrir la puerta al estirar su brazo.
-Gracias.
{...}
A las 7:50 ya estábamos en aquel restaurante, donde la entrada era decorada con pequeñas luces y algunos árboles chicos, la recepcionista era hermosa, tenía un buen rostro y ni se diga del cuerpo.
Una vez nos indicó nuestra mesa se retiro.
A lo lejos pudimos ver a nuestros otros socios, Nam y yo nos acercamos y comenzamos hacer reverencias. Respeto ante todo. Una vez sentados comenzamos hablar del trabajo.-Entonces, por el momento no tenemos ningún problema con la empresa, todo esta marchando de maravilla. -Hablaba Nam con cierto "ego".
-Nos alegra que les este llendo bien, ante todo a usted, Señor Min, que es el dueño de dicha empresa.
-Así es, Señor Choi, como ya lo dijo mi socio Nam, todo esta marchando de maravilla, si llegamos a tener algún inconveniente no dudaremos en llamarlos.
-Estamos de acuerdo, Min. Por cierto, acerca de la mía, yo si tengo inconvenientes. -Habló esta vez el Señor Im.
-¿Que clase de inconvenientes, Señor? -Hablo Nam.
-Resulta que hace una semana un oficial estaba de encubierto y estropeó una entrega que iba directo a Tokio.
-¿Y? -Hablé yo.- ¿Que fue lo que estropeó?
-Resulta que esa madrugada, un camión de carga iba a partir desdé Seoul hasta Tokio, pero, gracias a ese oficial todo se fue a la ruina, nos tendieron una emboscada y ahora debo ver la manera de sacar a Jay de la cárcel, ya que era el que iba a conducir.
-Deje todo en mis manos, Señor Im, yo lo sacaré de ahí.
-Gracias Min.
La noche paso de trabajo a cosas sin importancia, hasta ahora eran buenos en su trabajo, pero lo que dijo el Señor Im me tuvo intrigado, hace años que no teníamos problemas con la ley, ahora debía ver ese asunto. No lo dejaría a la ligera.
Pasaban de las 12:37 cuando todos nos retiramos, Nam me dejo en mi casa lo cual se lo agradecí. Subí a mi dormitorio, me puse mi pijama y me acosté en mi deliciosa cama. No pude dormir tan rápido, el recuerdo de aquel niño aún abundaba en mi mente, ya era la tercera noche que no podía dormir.
"Minié a sido un buen niño"
Mierda, quería volver a verlo, a escuchar su voz por primera vez, quería todo de él. Todo.
Sé que algún día lo encontraré.

ESTÁS LEYENDO
Secustrador Secuestrado.
Fiksi Penggemar¿Quien diría que el gran Min Yoon Gi dejo de ser quien es por solo un mocoso?