Mi Hilo Rojo Del Destino (Michaeng)

Capitulo 15:Desiciones

Jeongyeon POV

Maldita Son.

Miré a todos lados, miles de estudiantes pasaban y pasaban caminando como si nada, ajenos a mis problemas, pues así son todas las personas, viven en su propio mundo preocupándose por ellos y solo ellos, pero así me gustaban las cosas, me daba más tranquilidad.
Mentalmente ensaye lo que iba a decirle a Son...no, Chaeyoung, creo que en esta ocasión es mejor llamarla así...que nostalgia, hace tiempo que no me dirijo a ella por ese nombre ni en broma.
Un sonido retumbo en mi bolsillo, era un mensaje de Nayeon, decía "¿Cómo van tus preparativos?, yo ya he terminado con los míos. Suerte" acompañada de una foto de ella junto a una habitación de una serie de departamentos, sonreí al verla, aunque poco después me golpeé mentalmente, ¿Qué rayos estoy haciendo?, debo concentrarme.
Ah, ¿Qué preparativos?, pues, sucedieron muchas cosas si lo pensaba bien.

Flashback

-¡Sabe muy bien!, ¡Prueba un poco! – Dijo Nayeon con una cara alegre y un poco emocionada mientras me estiraba una fresa cubierta de chocolate.
No sé si me sonroje por su cara o por lo avergonzada que me sentía. Me estiré un poco y comí la fresa de su tenedor, ella solo sonrió complacida por mi acción mientras yo apartaba mi vista tratando de que no viera mi rostro, debe estar rojo ahora.
Admire el local, el restaurante "Im", uno de los muchos de la familia de Nayeon, ubicado en el centro de la ciudad, era exageradamente grande, tenía una balanceada combinación de lujo y simpleza, un lugar perfecto para comer de paso o para una ocasión especial, ya que tenía dos pisos, uno para cualquier persona y otra de extra lujo para ocasiones especiales y solo por reservación. Nayeon quería que la llevara aquí para comer, después que se lo prometí cuando hizo un intento de "consuelo" hacia mi persona después de que Mina me rechazó...que irónica es la vida.
La volteé a ver, ella estaba muy entretenida con su comida.
-Engordarás si comes tanto – Le dije mientras reí un poco al ver toda su comida, casi todos eran postres de distintas clases, de distintos tamaños, incluso había un postre helado con chocolates de diversas partes del mundo, servido en un vaso y cuchara de oro.
-¡No voy a engordar! – Gritó avergonzada – Yo hago mucho ejercicio para tu información...y nunca engordo, mi metabolismo lo impide – Dijo con un tono orgulloso.
-¿Enserio?, no puedo creer que te vayas a comer todo eso – Dije maliciosamente mientras veía todo lo que había en la mesa, trozos de pastel, helado, galletas, pays y otras cosas.
-Lo pedí porque tú pagas, es diferente en esta ocasión – Contestó, contraatacándome, por más que lo odie la desgraciada tenía razón, como ella lo dijo, pidió lo más caro del menú...los precios literalmente me dieron ganas de llorar, aunque tuviera dinero, era caro para mi gusto...por simples postres, suspiré.
-Tu ganas – Dije comiendo algo al azar de la mesa, debo admitir que con ella no la he pasado nada mal hoy, era divertido al igual que pasar el día con Mina, pero diferente.
-Como era de esperarse – Dijo cruzándose de brazos, su ego siempre sería enorme.
-Como digas – Mencioné mientras agarraba una cucharada de helado y se la estiraba para que la comiera, ella la acepto alegremente.
Ahora que lo pensaba, ¿Por qué rayos le estaba dando de comer en la boca?, ni idea, pero era una agradable sensación.
-Por cierto...quisiera hablar de algo contigo – Dijo Nayeon con un tono de seriedad en su voz mientras me miraba.
-¿Qué pasa? – Pregunté, no es muy común verla con ese semblante.
-Es sobre Mina y Chaeyoung...sé que no debería tocar el tema en este momento pero si no lo hago ahora no sé cuándo podré volver a hacerlo; ellas les van a contar su relación a sus padres, ¿Tienes idea de cómo es el padre de Chaeyoung?
-He escuchado rumores... ¿A qué quieres llegar?
-Su padre no lo va a aceptar a cualquier costa, estoy preocupada por lo que le podrá pasar a Chaeyoung, y también por la integridad de Mina, sabes lo que le puede pasar a ella...ese hombre es cruel, no le importará hacerle daño a Mina.
Mina...
-A lo que vengo, pasé lo que pasé, buscaré la forma de ayudarlas dependiendo de su situación, tengo dinero después de todo...aunque odie decir esto, tú lo sabes bien, el dinero en cierta manera mueve al mundo, pero la pregunta es, ¿Qué vas a hacer tú? – Dijo mirándome fijamente – En otras palabras, ¿Ayudarás a Chaeyoung en su relación con Mina?, ambas necesitan nuestro apoyo en momentos así....sé que aún estas algo dolida por lo que hizo ella en el pasado, pero créeme que ella no es así.
-Yo...
-Se de sobra que ayudarás a Mina pero...si la vas a apoyar tendrás que apoyar su relación, y con eso a Chaeyoung – A completó mientras tomaba una de mis manos por encima de la mesa y la apretaba.
Tenía razón, odiaba como ella podía ver por dentro de las personas, pero bueno, ella es muy observadora...a veces me preguntaba qué cosas pensaba Nayeon de mí, que cosas veía en mí, pero ahora ese no es el tema, es cierto que aún no superaba del todo ese rechazó, el rechazo de Mina, pero en cierta manera...me preguntaba cómo era realmente Son, si Mina se enamoró de ella fue por un razón.
Son y Mina, son unas personas delicadas, aparentando ser fuertes.
Esto solo se trataba de una cuestión...perdonar a Son por lo que me hizo en el pasado, dejar el pasado atrás.
Aunque me resulta un poco difícil, ella después de todo fue la primera persona que pude considerar como amiga, y después de que las alianzas de nuestros padres se aliaron, me dejo botada como basura, como si nada hubiera pasado...eso me dolió, y es algo que nunca he dejado de pensar en todos estos años.
Me acuerdo la vez en la que éramos amigas, fue por poco tiempo, pero divertido, al acordarme siempre sonreía, como lo estoy haciendo ahora.
Apoyar la relación la persona que quieres y la que dijiste odiar...no es fácil.
-Jeongyeon...sabes algo, sé que yo al principio te parecí una desgraciada niña mimada, y ahora creo que caigo bien, si no, no vendrías aquí conmigo para empezar – Dijo con una sonrisa melancólica – Muchos somos así...pueden aparentar algo, pero todos tienen sentimientos en el fondo.
Creo que puedo aceptar su relación, creo que puedo perdonar a Son...y creo que puedo renunciar a Mina, de una vez por todas...es lo mejor, así nadie saldrá herido, incluyéndome, debo de intentarlo.
Suspiré.
-Creo que entiendo tu punto, las voy a apoyar en su relación, a Mina...y a Chaeyoung.
Nayeon saltó de su asiento técnicamente y me abrazó por encima de mesa, lo que me forzó a medio pararme.
-¿Qué estás haciendo?, ¡Hay gente aquí y me estoy manchando la ropa de dulce! – Reclamé, aun así, no tenía la intención de deshacer su abrazo.
-Es solo que me alegra que dijeras eso, al final no me decepcionaste – Susurró.
Sonreí, Nayeon en el fondo había cambiado, en realidad nunca pensé que ella sería la que me diera un sermón sobre hacer las paces con Chaeyoung, y hacerme pensar sobre su relación con Mina...ahora me sentía mejor. No voy a negar que aun así seguía queriendo a Mina un poco, pero Chaeyoung al final se la merece.
Poco después ambas nos volvimos a sentar correctamente y un mesero llegó con la cuenta, Nayeon me la dio... ¿¡2500 dólares?!, ella solo se empezó a reír al ver mi cara y el precio de la cuenta, saqué el dinero de mi cartera y lo dejé en la mesa, luego tome a Nayeon del brazo y la saqué del lugar.
-Nunca más vuelvo a invitarte a comer – Dije mientras me volteaba para mirarla con un gesto de reproche.
-Es una lección para el futuro, mi querida Jeongyeon... ¿Sabes?, ¿Por qué no me invitas al cine?, no tengo nada que hacer ahora.
-Todo mi dinero se fue en la comida – Le repliqué.
Nayeon solo sonrió y me estiró con una mano el dinero que había dejado en la mesa, me paré en el acto confundida.
-Fuimos a comer a mi restaurante, es obvio que no me cobrarán nada a mí, que soy hija de los dueños, señorita Yoo.
De seguro ver mi cara en este momento no tiene precio, ¡Casi no compré nada de comer para mí porque pensé que me la cobrarían!, había olvidado que siendo ella no le cobrarían nada.
-Desgraciada... - La tomé del brazo y la arrastre literalmente por la calle.
-¡Oye!, ¿a dónde me llevas?
-¿Querías ir al cine no?, pues ahora vamos y tú pagas por engañarme de esa manera.
-¿Eh?, ¡Así no es divertido! – Dijo Nayeon mientras hacía que la soltará y se aferraba a mi brazo, me dio un poco de vergüenza su acción pero al final no dije, igual me gustaba la sensación.
-Pues tú tienes la culpa – Repliqué.
-Ya se, tu comprarás los boletos y yo la comida – Dijo Nayeon algo pensativa.
-¿Quieres comer más? – Pregunté, enserio, su estómago era enorme, pero me parecía adorable.
-Ya te dije que no engordo, además una película no es una película sin comida – Sonrió.
Al verla sonreír así no podía evitar que una sonrisa inundara mi rostro.
-Tienes razón – Le seguí el juego.