parte uno

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Nat POV:

Otro dia en el paraiso.

No, no estoy tratando de sonar sarcástica. De verdad vivo en el paraíso.

Creta, una preciosa isla de la bella Grecia a la que vine a vivir con mis padres.

Ellos eran dueños de un hotel en la isla, era uno de los más conocidos del lugar por lo que normalmente estaba lleno. No era ni tan lujoso, pero tampoco tan ordinario; eso lo hacia perfecto.

-Nat, dile a Ramona que la habitación ciento cinco necesita ser arreglada. -Vi extrañada a mi mamá.

-Esa es la suite... -Entrecerre los ojos unos segundos.- ¡Viene alguien importante! -Salté de mi asiento emocionada y me acerqué a mamá.

-De hecho ya esta aquí. Acaba de reservar la habitación y fue a darse una vuelta por la isla con Gustavo. -Mamá depositó las sábanas limpias en la cama de mi cuarto.

-¿Quién es? -Extiendí la sabana en mi colchón.

-Creo que es un basebolistá. -Se encogió de hombros restándole importancia.- Ponte algo decente, Andrés anda buscándote. -Alzó ambas cejas coquetamente y puse los ojos en blanco.

-Hora de superar a Andrés, mami. Yo ya lo hice. -Ella rió y negó con la cabeza para luego dejarme sola en mi cuarto.

¿Un basebolistá? La verdad yo no conocía muchos basebolistas.

En realidad no conocía a ninguno.

En busca de la felicidad / Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora