Harry siempre fue un niño inocente.
¿Podría la homofobia cambiarlo?
Y lo más importante.
¿Podría cambiarlo un pequeño chico que no le pondrá las cosas tan fáciles?
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Donde el padre de Harry es homofóbico.
O donde Louis y Harry follan mientras...
El rizado se despertó al sentir como algo, o más bien alguien se enroscaba alrededor de su miembro, al bajar la mirada vio como el oji-azul metía todo lo que podía de su polla en su boca.
"¿Q-qué mierda... Ahh... ¿Louis?"
El castaño chupaba y lamía el glande, haciendo que el rizado cerrara los ojos y apretara con fuerza las sábanas. Mierda, si que era bueno.
"¿C-cómo has en-entrado en mi casa?"
Louis separó la cabeza por unos segundo para decirle:
"Shh. Solo cállate y disfruta."
Realmente se sentía como un sueño, ¿el oji-azul en su casa? ¿Haciéndole una mamada?
"Dios, Louis, si-sigue. Voy a..."
No le dejo acabar la frase, ya que el pequeño empezó a chupar más fuerte, sintiendo como llegaba a su garganta y como pequeñas lágrimas recorrían sus mejillas.
Harry se corrió de esa manera, con los azules ojos de Louis llorosos mirándole fijamente y con su polla en su garganta.
Cuándo los pequeños rayos de sol le hicieron abrir los ojos lentamente fue cuando se dio cuenta que, ni Louis se encontraba ahí, ni le había hecho una mamada.
Lo que si se dio cuenta es que se encontraba tumbado en la cama, llegando tarde a clases y con una enorme mancha en sus boxers.
El día no es que hubiera comenzado bien, el rizado había llegado tarde a clase de latín, lo que significaba que tendría que pedirle a alguno de los pringados de sus compañeros que le dejaran los apuntes, cosa que no le apetecía hacer para nada.
Las clases habían sido una mierda, pero como siempre, así que por esa parte no se podía quejar.
Lo que no se esperaba es que, al salir de clases se encontraría con...
"¿Kendall? ¡Kendall! ¿Qué haces aquí?"
No se esperaba que su amiga de la infancia se encontrara en Manchester, ellos se distanciaron poco después de que la chica tuviera que mudarse a Londres con sus padres, y que ahora se encontrara delante de su universidad era realmente una sorpresa.
"¿Qué pasa? ¿Ya te habías olvidado de mi?" La castaña se acercó a Harry y lo abrazó con todas sus fuerzas, no era cualquier amistad pasajera, ellos se habían ayudado el uno al otro durante mucho tiempo.
El oji-verde le mandó un mensaje a Zayn diciendo que no podría ir a buscarlo hoy por razones personales, no quería que le reprochara nada, otra vez. Realmente hacía mucho tiempo que no veía a Kendall, no la veía desde que cortó con Xander.
Llegaron a casa de Harry y, como no, este se había olvidado las llaves, por lo que tuvieron que llamar al timbre, lo que les sorprendió es que no fuera Des quien les abriera la puerta, si no un chico alto y con gran complexión, con unos bonitos ojos color miel.
"¿Liam?"
"Hey, Harry. Mademoiselle, Liam a su disposición." El oji-miel cojió delicadamente la mano de la chica y le dio un beso en el dorso, para luego guiñarle un ojo descaradamente.
"Ni lo intentes Payne." Harry sabía que no podía decirle de la nada que era lesbiana, pero por dentro se estaba riendo al pensar que su primo intentaría conquistarla.
Ímbecil.
"Harry, ¿me vas a explicar quién es este y que hace en tu casa?" Kendall se veía bastante confusa.
"Kendall, este es Liam, mi primo retrasado. Liam, esta es Kendall, la amiga que nunca conseguirás. Ahora, querido primito, vamos a sentarnos todos pacíficamente y me vas a explicar que coño haces aquí."
Después de que la chica se fuera asegurando que mañana se verían, Liam empezó a contarle a Harry la razón de porqué se encontraba ahí.
"¿Así que tía Karen te echó de casa? Yo también te echaría a decir verdad, no la culpo, pobrecita, ya aguantó mucho teniéndote en casa por diecisiete años."
"¿Qué intentas decir con eso idiota?" El oji-miel le pegó un pequeño puñetazo de broma su primo. "Además, fue tu padre el que me invitó a quedarme aquí."
"Espera, ¿vas a quedarte aquí?" Es verdad que podía parecer que estos dos se odiaban, pero en el fondo, ambos sabían que la familia es la familia, y siempre se estarían apoyando el uno al otro. "¿Cómo no me avisaste? Deberías habérmelo dicho antes, te hubiera hecho un sitio en mi habitación, la tengo hecha un asco."
"Tranquilo hombre, no pasa nada, solo serán unos días, ya verás como a mi madre se le pasa, además, puedo dormir en el sofá."
"Si tú lo dices..."
"Harry... Sé que quizás no es el momento, pero... ¿Le has dicho ya a tu padre que eres gay? Cuanto más tarde se lo digas más posible sea que te pille en tu habitación o en cualquier otro sitio, y eso va a ser mucho peor."
"Querido Liam, eres muy joven todavía. Las personas como mi padre no cambian, se lo diga yo o lo descubra él. Por eso voy a acabar la universidad y luego me iré, lejos, no quiero volver a verle la cara, no después de la mierda que me hizo pasar."
"Y... ¿Tu madre? ¿Qué pasa con ella?"
"No le quedará otra opción que entenderlo, tiene dos opciones: O por fin deja las inseguridades de lado y deja a mi padre, o lidia con la perdida de su hijo, porque no pienso acercarme más a esta familia de putos homofóbicos."
"Entiendo... Bueno, cambiando de tema, ¿quieres ver una peli? Como cuando éramos pequeños." Liam estaba triste al pensar en lo que Harry pretendía hacer, pero sabe que no podría hacerle cambiar de opinión, el no sabe todo lo que el rizado tuvo que pasar.
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¿Os cae bien Kendall en la vida real?
¿Y en la fic?
A mi sí, además creo que está saliendo con Cara (Cake yeiiii)
