Capítulo. 3 - ¿Confianza?

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Después del pequeño incidente entre Taehyung y los otros dos chicos, éstos habían decidido ayudarlo, subieron al  auto con él y durante el recorrido nadie dijo nada, Taehyung se había sorprendido un poco por la tercera persona que viajaba en la parte trasera del auto, un joven castaño con  ojos agrandados y piel perfecta.


Taehyung se había sentido un poco incómodo en el camino, pero sólo se limitó a mirar por la ventana, sumido en sus pensamientos fué interrumpido por la voz de aquél chico que iba a su lado.


—¿estás herido?...—Dijo él castaño, sin poder quitar la mirada de la ropa ensangrentada de Tae-


—¿He?...—Tae volteó a ver al más joven y regresó la mirada a su ropa llena de sangre, se sintió mal por un momento.


—Jungkook, guarda silencio.—Habló el peli verde.-


—Lo siento Hyung, sólo quería saber, tal vez necesite ayuda médica, no podemos dejarlo así.—Dijo el joven sin más.

—Ya te dije que dejes de ser tan amable con desconocidos.—le volvió a reclamar el pálido.

—N...No es necesario, en serio, gracias por preocuparte, Ju..Jungkook.—Respondió Tae.-


El mencionado le dedicó una sonrisa para después seguir mirando por la ventana.


—Por cierto, me llamo, Kim Namjoon.—Dijo el peli rosa mirando por el retrovisor por unos segundos,  buscando la mirada de aquél joven, para luego dirigir nuevamente su mirada a la carretera.-



—Oh, mucho gusto, Namjoon.-Dijo el castaño observándole desdé atrás–.


Namjoon sonrió por las palabras del chico y luego miro de reojo al pelí verde, le dió un leve golpe al hombro de éste, llamando la atención del joven que iba en el asiento del copiloto, volvió su vista a la carretera, para después hablar.-


—¿No piensas en presentarte?..–


—¿Qué?.-Respondió el chico, pues había estado distraído durante el camino.–


Namjoon rodó los ojos, pensando en lo distraído que podía llegar a ser su mejor amigo a veces.


—Qué te presentes.-Dijo el de piel morena.–


—Assh....soy Min Yoongi.–Dijo un tanto grosero.–

—El siempre es así de amable...–se burlo el de pelo rosa.

—Mientras no me abraces y no me jodas, todo estará perfecto, tendrás muchos años de larga vida.– Volvió hablar el peli verde levantando una mano en forma de saludo sin mirar al joven de atrás, para luego bajarla y seguir mirando por la ventana.

Jungkook comenzó a reírse por la actitud de su mayor.

—Diaculpalo, a veces Hyung suele ser algo frío, pero cuándo lo conoces bien, es un amor de persona.–Dijo bromeando mientras miraba a Tae, quién le sonreía de forma sincera.


—Cállate, kook no me obligues a lanzarte por la ventana.–Dijo el mayor, rodando los ojos.

Él pelirosa comenzó a reír por la pequeña pelea de sus dos amigos, después de unos 25 minutos más habían llegado a su destino, un edificio con aproximadamente 4 pisos de altura, estacionaron el vehículo y todos bajaron.



Narrado por Taehyung.

Llégamos frente a un edificio y dejaron el coche en el pequeño estacionamiento, los cuatro bajamos y nos adentramos en el, subimos al último piso y entramos al departamento "304".


Él lúgar no era ni tan grande, ni tan pequeño, a simple vista era acogedor, agradecía eternamente a aquéllos chicos por ayudarlo y traerlo a su casa, a pesar de no conocerlo bien, púes no tenía más a dónde ir, su plan no era seguir vivo, pero ellos aparecieron y me tendieron la mano.


—La casa tiene tres habitaciones y dos baños, pero lo siento, yo tengo la habitación con el baño incluido a dentro, así que tú decides si quieres dormir con Jungkook o Yoongi.–Habló el pelírosa riéndose, atrayendo la mirada de los demás chicos.

—Qué molesto eres Nam...–Le  contestó el más pálido de ellos.

—A mí no me molesta en lo absoluto, Tae sí quieres puedes dormir conmigo, la habitación en dónde duermo tiene una litera  y una cama individual a parte, es eso o dormir con Yoongi Hyung en una cama matrimonial.–Dijo Jungkook riéndose.


Comencé a reír por las palabras de Jungkook, pues para ser sincero, no quería dormir con Yoongi, miré a mi al rededor y vi la pequeña sala con una mesa de centro, había una pequeña televisión de plasma en un  mueble color chocolate, tenía una consola de video juegos conectada, regresé mi vista al más joven de nosotros para regalarle una sonrisa.


—No te preocupes, Jungkook, puedo dormir en el sofá, ya han hecho mucho por mí hoy.–Dije dedicándole una sonrisa a los tres chicos frente a mí.-


—No, nada de eso, dormiras con Jungkook, elige la cama, podrás darte una ducha también, Jungkookie te prestará algo de ropa para dormir.–Respondió el moreno pelirosa.


—Gracias, de verdad, muchas gracias Namjoon Hyung.—Le agradecí de la manera más sincera.



—De nada Tae, por ahora sólo descansa, puedes quedarte el tiempo que desees, por lo tanto yo me retiro a mi habitación.–Dijo levantando la mano en forma de despedida, para luego retirarse a su habitación.-

—Descansa Hyung.– se despidió el menor.-

Yoongi hizo lo mismo retirándose a su habitación sin decir nada, Jungkook me guió a la habitación dónde dormiríamos, me dió a escoger la cama y opte por dormir en la cama individual a lado de la litera que sólo era separada una de la otra por una mesa de noche con una lámpara y un despertador.

Jungkook, buscó en el armario de aquella habitación un conjunto de ropa y me la entregó junto con una toalla.


—Toma, puedes darte un baño, está saliendo de la habitación a la derecha, es la segunda puerta.—Me dijo amablemente él menor.


—Gracias, Jungkookie.—asentí, para luego salir de la habitación y dirigirme al baño.


Después de terminar de ducharme y ponerme la ropa cómoda y limpia, entre de nuevo a la habitación y encontre a Jungkook totalmente dormido, sonreí y me acosté en la cama, tarde casi una hora y media para poder conciliar el sueño, pues las imágenes de lo que había sucedido unas horas atras, rondaban por mí cabeza, mí padre tirado en el frío suelo, mi madre llorando y yo cubierto de sangre.


Luego pensé en lo qué Namjoon Hyung, Yoongi Hyung y Jungkookie habían hecho por mí y una pequeña risa se escapó de mi rostro, algo dentro de mí le decía a mí corazón  que debía quedarme así con ellos por siempre, me di la vuelta cerrando los ojos y después de unos minutos, me quedé profundamente dormido.





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Bad guys good guysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora