Bittersweet [Hyungkyun]

7

Hyungwon salió de ese examen como si hubiera sido drenado, la verdad es que por más que se esforzó al final no había logrado que la base de datos funcionara bien con el programa, como era de esperarse, ni siquiera supo por qué no funcionaba y estaba agotado mentalmente de echarle cabeza a algo que no entendía, al menos Changkyun no iba a sacar un cero, mínimo un uno se esperaba de ese desastre de trabajo, pero no un cero.

Miró la ahora en su móvil y al no ver ninguna llamada o mensaje de Changkyun supuso que debía seguir muy ocupado en la sesión de firmas, más tarde iba a buscar noticias y fotos al respecto con sus fanbases más famosos.

—Eh, Changkyun, ¿vas para clase?

Hyungwon se sobresaltó al sentir un brazo al rededor de sus hombros y se giró para ver el rostro de alguien que no reconocía, seguramente amigo de Changkyun, era un chico alto y delgado con ojos muy grandes. Ya se estaba acostumbrando a que gente rara le hablara de la nada.

—No, ya voy a casa.

—Está bien, solo quería avisarte que el sábado haremos una pequeña fiesta en la casa de Minwoo, ¿te animas a ir? De paso dile a Jooheon también cuando hables con él.

—Claro, allá nos vemos. —Hyungwon actuó con naturalidad, sonriendo mientras aceptaba la propuesta aunque seguramente ni fuera a ir. Ni siquiera se hablaba con Jooheon, desde el otro día que lo había tratado mal no habían vuelto a hablar, y cuando lo veía por ahí, fingía que no lo conocía o lo evadía; ya se encargaría el menor de arreglar las cosas con su amigo, era algo que no le incumbía aunque él fuera el causante. —¿A qué horas?

—A las 8, si puedes lleva comida o bebida.

—A las 8 entonces, ya veré que llevo.

—Perfecto, nos vemos entonces, yo sí tengo clase.

El chico se despidió y se alejó agitando su mano, Hyungwon se le quedó mirando hasta que lo vio reunirse con otro chico exactamente igual a él, hacía mucho que no veía gemelos, ¿quiénes serían? Changkyun parecía conocer a muchas personas a pesar de ser tan raro, quien lo diría.

Hyungwon volvió a darse la vuelta y caminó directo a la salida, pasaría por su casa para recoger unos libros que el menor le había pedido y para dejar una nota que Changkyun había escrito previamente para su papá explicando que iba a quedarse unos cuantos días más con Jooheon.

Al llegar a casa se encontró con el apuesto y muy sexy vecino de Changkyun y rápidamente sintió que su día acababa de mejorar un poquito. Que buena suerte, esta vez no lo iba a dejar escapar.

—Wow, Changkyun, que bien te quedó el cabello, el color te queda muy... lindo. —El chico había dicho lo último con algo de timidez y una adorable sonrisa que Hyungwon respondió de inmediato.

—Gracias, ¿entonces me veo guapo?

Hoseok asintió con la cabeza en respuesta. —Es decir, siempre te ves guapo, pero este color umh, también te queda bien.

El chico parecía que no sabía que decir y Hyungwon no dejaba de encontrarlo adorable. —Gracias, Hoseok, ¿quieres pasar un rato?

Hyungwon acababa de acercarse al panel de la entrada para marcar el código y abrió la puerta haciéndose a un lado, como invitándolo a pasar. —Aún te debe quedar algo de tiempo antes de que vayas a entrenar.

Menos mal Changkyun le había dado ya los datos básicos de aquella preciosa escultura y podía hablarle con más confianza, ya sabía que trabajaba medio tiempo y luego entrenaba para convertirse en un idol.

—No quiero ser molestia.

—En lo absoluto eres molestia. —Hyungwon volvió a insistir y al final Hoseok no tuvo de otra que ingresar a la casa.