Capítulo 1

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Stiles llego a su casa con el corazón afuera del pecho y los nervios subidos hasta la cabeza, aún sin superar lo que su cuerpo le había dicho hacía unos segundos atrás. Por ello camino con rapidez por el pasillo de su casa, ignoro la mirada interrogativa de su padre y fue directo a su habitación donde una vez ahí, se desplomo en la cama y con la almohada tapándole la boca, lanzo el grito que estaba ahogando su ser desde que salió del loft de aquel hombre.

—¿Encontraste tu billetera? —pregunto la voz de su padre detrás suyo y entonces los colores se le subieron al rostro y las náuseas se le atoraron en la punta de la garganta obligándolo a toser con fuerza, Noah paso su mano por la espalda de su hijo dándole unas palmaditas para que no se ahogara con su propia bilis y cuando su hijo dejo de exagerar, John cambio la pregunta formulada por otra—. ¿Derek te dio algo echado a perder?

—Creo que soy Gay papá —dijo sin pensar el muchacho a lo que John le respondió como lo había hecho un año atrás.

—Tú no eres gay, no vestido así. ¿Por qué me vuelves a decir eso sin sentido, Stiles?

—Lo estoy diciendo en serio —se defendió poniendo su ceño fruncido—. No sabes cuan serio estoy diciéndolo ahora.

La mirada de Stiles se cruzó con la de su padre y luego soltó un resoplido que solo causo una sonrisa en el sheriff de Beacon Hills puesto que el niño tenía esa manía luego de hacer una clase de berrinche. Dio un par de palmadas más y luego dejo de hacerlo. Su hijo era un niño bastante paranoico, pero lo conocía y conocía de tendencias homosexuales en los niños de esa edad, y podía llegar a la conclusión de que la gente normal no iba cambiando sus preferencias sexuales de la noche a la mañana. Aunque... ¿Cuándo Stiles había sido alguien normal? Se preguntó y justo esa tarde puede ver que no se comparaba a la anterior, el brillo que halló dentro de los ojos de Stiles le mostraban una verdadera preocupación que le parecía contagiosa y nada exagerada.

—¿Por qué lo piensas? —pregunto un poco más serio, soltando un suspiro, dándose por vencido y esperando a que su hijo le respondiera algo con la suficiente coherencia para creerle.

—Bueno, Derek, él...

—¿Te hizo algo? —Noah frunció el ceño al escuchar ese nombre y sus instintos sobreprotectores salieron a la superficie. No debía mencionar la de cosas que sabía gracias a su trabajo acerca de ese hombre y de una infinidad de abusos y lo que menos deseaba Noah, era que su hijo pasara por alguna de ellas, sin contar con alguna decepción amorosa.

—No, él... Él no me hizo nada —se apresuró a decir-. Es solo que... es muy guapo.

Stiles volvió a ocultar su rostro en la almohada y comenzó a lamentarse de su situación, sin embargo su padre en lugar de consolarlo, soltó una carcajada que, apostaba, había sido escuchada por todo el vecindario. El hijo del Sheriff le vio acusándolo y luego, soltó una risa fingida, después de todo no era muy común en el oficial que se riera de esa manera y a veces añoraba ese sonido, porque era como regresar a esa época donde su madre vivía y eran felices juntos.

—Bueno —exclamo su padre una vez que recobro su control—. Pero que sea guapo o lo veas como un hombre guapo no te hace gay, estas exagerando las cosas, ¿Te gusta aunque sea? ¿Con esa misma intensidad como cuando te gustaba la hija de los Martín?

Stiles mordió la comisura de su labio y pensó al respecto. Nadie superaba lo que alguna vez significo Lydia Martín dentro de su vida y ciertamente Derek no le recordaba esa torpe emoción de esperar al día siguiente solo por ver a la pelirroja, ni siquiera a esa sensación de vacío que sentía cuando Lydia le lanzaba algún cumplido, pero no podía negar que esa tarde había sido distinta. Era inquietante saber qué es lo que pasaría con él y Derek el día después del mañana y estaba nervioso por ello. Era como cuando había hecho el examen para ingresar a secundaria, nauseas, miedo, emoción y un vació instalado en su estómago que no le dejaban concentrarse en lo más mínimo, sin embargo no puede decir que eso significaba que le gustaba Derek Hale, porque hacer eso sería como admitir que le gustaban los exámenes y ¿a quién le gustan esas cosas? Solo a un erudito o a un nerd y Stiles Stilinski podía ser de todo, menos un nerd.

Tal vez sea gay [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora