La luz de mi ventana hizo que despertara, de repente sentí como mi novio estaba acostado en mi pierna. No sabía la razón, pero se veía bastante cansada y agobiado.
- Jimin ¿Estás bien? - este no contestó.
Mi novio seguía encima de mi pierna, me preocupaba que no respondiera.
- Jimin, bebé responde.
Él seguía igual, no se movía para nada, mis nervios aumentaron, no sabía qué hacer, tal vez estaba enfermo o se había desmayado. En ese momento todos los pensamientos malos llegaron a mi cabeza.
Poco a poco las lágrimas empezaron a salir de mis ojos.
- Jimin despierta -aún no se movía ni un pelo.
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Quité lentamente mi pierna y no se movía, me preocupé aún más, por lo que más lágrimas salieron. Lo tomé por la cintura y le di la vuelta, aún no despertaba.
Me recosté encima de su pecho y por fin despertó.
- Hola mi amor - dijo abriendo sus ojos poco a poco.
- ¡Jimin! -dije mientras daba muchos besos por su cara.
- Mi amor, ¿estabas llorando?
- Es que pensé que estabas......
- Eres demasiado paranoica ____, estoy bien.
- Supongo que lo soy.
- ¿Te asustaste mucho no? Tú respiración es muy agitada.
- Si, tenía mucho miedo -Jimin me tomó del cuello haciendo que nuestros labios se pegaran.
