Tenias que ser tú

Parte 7

Al día siguiente el dolor de cabeza era tremendamente monumental, casi no podía recordar nada ni cómo es que acabe en mi cama ni porque llevaba una camiseta que no era la mía. poco tenía para pensar que en algún momento de la noche me la tuve que quitar, demasiados martilleos en mi cabeza para ponerme a evaluar la situación.

¿porque habré bebido tanto?

Extendí mi mano hacia la mesilla de noche donde tenia el movil o donde casi siempre lo ponía porque esa mañana no estaba ahí. Me puse a buscarlo debajo de la almohada y cuando seguí sin notar nada me levanté completamente asustada lo cual fue otra pésima idea ya que inmediatamente el dolor aumentó y tuve que sentarme en la cama de nuevo.

¿Alguien me habrá robado el móvil? ¿O quizá solo lo he perdido? Laze un gruñido y me tumbé sobre la cama.

- Tessa Black, te has lucido-. Dije en voz alta para mi

Sin previo aviso sonó el timbre de la puerta de mi casa haciendo que frunciera el ceño, eran como las doce de la mañana, mis padres estaban trabajando y yo no esperaba ninguna visita. Baje las escaleras descalza curiosa por saber quién había llamado a mi puerta esa mañana. Posiblemente solo fuera el cartero pero me quedé completamente sin voz y de piedra cuando ante mi se encontraba William con un mechón rizado cayéndole sobre su frente. Me sonreía y yo solo permanecía muda sin saber muy bien qué decir.

- Cualquiera diría que estás viendo un fantasma-. Seguía sonriendo

Despierta Tessa, mierda. Di algo, lo que sea.

- Supongo...- ¿En serio? Venga, puedes hacerlo mejor?- ¿Qué estás haciendo aquí?-. Pregunte frunciendo el ceño.

- Bueno...-. Colocó uno de sus musculados brazos en el marco de la puerta justo al lado de mi cabeza-. Pasaba por aquí

- No es momento para sacar tu lado misterioso

Se echó a reír contento de hacerme perder los papeles en tan solo cinco segundos.

Su mano derecha se movió ligeramente hasta su bolsillo trasero sin dejar de mirarme a los ojos.

- Creo que se te perdio algo-. Agito el móvil con gracia delante de mi cara

Mis ojos se abrieron como platos ¿como tenía el mi movil? Intento cogerlo pero el levanto la mano divertido alejando el móvil de mis manos.

- ¿Como lo tienes?

- Estaba en mi coche

- ¿En tu coche? ¿Que hacia en tu coche?

- Tessa Tessa-. Dijo como si estuviera regañando a una niña de cinco años-. No deberías beber, luego suceden estas cosas

- William...-. Le advertí

El río y se pasó un mechón de su pelo detrás de la oreja.

- Te traje a casa pajarillo-. Tendió el móvil hacia mi y yo lo coji apresuradamente-. En realidad no te querías ir de la fiesta pero estabas haciendo demasiado el tonto

Mierda. Trago saliva y siento como mis mejillas se ponen roja, no quiero saber que clase de tonto hice, no quiero saberlo, no quiero saberlo.

- Tienes un bonito cuerpo bajo mi camiseta Tessa

Mierda. Ahora si que estaba sin palabras. Espera espera espera, mi cabeza daba muchas vueltas.

- ¿Quieres decir que tu y yo nos...?-. Ni siquiera podía acabar la frase

Por Favor que no me haya acostado con William, rezaba por dentro, eso explicaría que me dijera ese comentario, agache la mirada hacia la camiseta que llevaba, sentía que ardía con tan solo tocar mi piel. Si me he acostado con él sería el mayor error de toda mi vida.