Cuál piedra se hunde en el agua, por su propia armadura, Y con todas sus fuerzas intenta nadar. Lejos la princesa, que no quiere serlo, llora en su torre al verlo debajo del agua.
El óxido lo corroe y lo lástima, pegada su armadura está. Incapaz de reconfortar a su princesa, sólo quiso hundirse más; Tal vez desapareciendo él, ella dejaría de llorar.
Y así el agua comenzó a subir, más no el a bajar, sabía que eran sus lágrimas por no querela soltar.
ESTÁS LEYENDO
el caballero y el laberinto
General Fictionun caballero de armadura oxidada se abre paso A través de un laberinto interminable, hostil e indifenrete a cualquier lamento