Entre las sombras - KookTae

30

-¿Estas cansado? - preguntó el moreno mientras se sentaba en el asiento del piloto de su auto. Jungkook lo miró sobarse las rodillas con el ceño fruncido.

-No- susurró- pero tu si ¿Debemos parar para ir a comer? Ni siquiera has desayunado- Taehyung solo asintió y encendió el motor del auto.

-A este paso nunca podré mudarme de casa de Namjoon Hyung.

La verdad era que se habían pasado toda la mañana y parte de la tarde buscando un departamento para Taehyung; el Moreno realmente quería rentar un departamento para dejar ya la casa del platinado, y no es que no quisiera vivir con él o que lo hubiera corrido, sino que él se sentía una carga más para su mejor amigo, sentía que aquel chico merecía su propia privacidad, así que esa mañana se levantó dispuesto a conseguir un departamento, pero estaba siendo tan dificil. Ninguno de los departamentos que le habían mostrado había sido de su agrado o al menos no llenaban su expectativa.

-¿Quieres ver un ultimo departamento hoy? Prometo que luego iremos a comer- Jungkook lo miró con reproche. Él no tenía hambre pero no le gustaba la idea de que Taehyung no había comido nada en casi todo el día. El moreno lo miró rápidamente con un puchero en los labios y posteriormente fijó su mirada enfrente.

-De acuerdo- asintió.

-¡Yaih!- gritó el azabache emocionado- bien, el proximo departamento está a unas cuantas cuadras- miró su GPS- espero este sea el indicado, no quiero tener que salir mañana de nuevo para encontrar uno- bufó con cansancio.

Después de unos minutos, Taehyung aparcó el auto frente a un gran edificio de cuatro pisos, por fuera se veía como un lugar bastante decente y eso hizo sonreir al moreno, no es que él fuera tan exigente, pero ganaba lo suficiente como para pagarse un buen lugar para vivir. Jungkook lo siguió de cerca cuando el azabache avanzó hasta la entrada de aquel lugar, lo primero que vieron al entrar fue una gran recepción limpia, con paredes pintadas de blanco, el piso de marmol negro, muebles negros y un gran candelabro negro en el techo, justo enmedio de la habitación. La sonrisa en el rostro del moreno no podía ser mas grande, aquel lugar ya le estaba dando buena espina, aunque viendo solo la recepción pudo pensar un poco en lo caro que posiblemente costaba la renta de un departamento ahí.

Una chica alta y delgada, de cabellos castaños, los saludó con una gran sonrisa. Taehyung se acercó hasta el mostrador seguido por el castaño. Aquella castaña parecía no querer quitarle los ojos de encima a Jungkook, cosa que lo hizo ponerse un poco nervioso mientras que Taehyung parecía querer arrancarle los ojos con sus propias manos, ni siquiera sabía por que se sentía tan molesto por eso.

-Buenas tardes, vengo por el anuncio de la renta de departamentos. Me gustaría verlos- extendió el folleto frente a ella. La chica asintió y sacó una tarjeta de un cajón.

-Buenas tardes. Claro, siganme- la castaña le hizo una seña a un guardia que se encontraba cerca de ahí y posteriormente avanzó hasta los elevadores.

-¿Es para ustedes dos? - preguntó la chica una vez que estuvieron arriba del elevador y miró al castaño mientras jugueteaba con un mechón de su cabello. El moreno asintió apretando la mandíbula, Jungkook solo se quedó en silencio- entonces, quieren un departamento con dos habitaciones - Taehyung negó con una leve sonrisa en el rostro. La castaña solo frunció el ceño.

-Buscamos un departamento con una sola habitación, la verdad es que no podemos dormir por separado ¿Verdad amor? - Taehyung tomó la mano de Jungkook mientras este sentía a su cara arder de la vergüenza ¿que se supone que estaba haciendo?. La chica borró la sonrisa de su rostro soltando de paso su mechón de cabello y se enderezó en su lugar esquivando la mirada de ambos chicos que se encontraban frente a ella.