Taek Woon
Pude sentir como sus músculos se tensaron al oír mis palabras. Sus ojos son mucho más lindos con aquel miedo que ahora tienen dentro.
-Y-Yo...ya debo...me están esperando. -retrocedió un poco pero volví a hacerme a él. No dejaré que se vaya así de fácil-
Más bien, no tengo planeado dejarlo ir. No por ahora.
Lo tomé de sus brazos para impedir que hiciera algo de lo que se pudiera arrepentir.
-No deberías tener miedo -tomo su barbilla y con mi pulgar separo un poco sus labios- no hay nada que temer. Es decir, no te haré algo que no te guste.
-¡No te atrevas a tocarme! -giró su cabeza con ¿Molestia. Odio. Miedo? No lo sé. Mala opción-
Hubiera preferido un "No me toques, por favor".
No. De igual forma no lo hubiera dejado ir.
-¡Querías ayudarme, ¿No?! -hay pocos centímetros de distancia entre sus labios y los míos- bien. Entonces ayúdame.
Sin darle tiempo de defenderse lo arroje contra el frío suelo, cayó sobre su brazo izquierdo y pude ver una mueca de dolor en su rostro. Me coloque encima de él y comencé a besarlo a la fuerza, sus manos empujaban mi pecho en un intento de alejarme de él. Que poca fuerza tiene.
-Mis padres tienen dinero -ofrece- déjame ir y yo te daré todo el dinero que quieras.
"Con dinero baila el perro"
No, definitivamente eso no va conmigo.
-¿Crees que yo quiero dinero? -sonreí con diversión-, ¿Por qué querer dinero cuando tengo a un chico lindo entre mis piernas?
-Por que ese chico lindo te odiara si llegas a hacerle algo.
-Puedo vivir con eso.
Con una mano sujeto las suyas encima de su cabeza, y con la otra recorro los adentros de su camisa. Su piel al igual que sus labios son suaves. No hay duda que después de esto será un verdadero desperdicio abandonarlo, pero, ese es el ciclo de la vida. Al menos de mi vida. Cuando ya no necesitas algo, simplemente lo botas. Sin importar lo que haya sucedido o pasado. Hyuk sabe muy bien eso.
Su cuerpo está comenzando a reaccionar a mis caricias, al parecer alguien también desea esto. Arranco la camisa de su cuerpo y comienzo un camino de besos que van de su vientre hasta llegar a su clavícula. Comienzo a lamer y morder en esa zona, sólo hay un problema, esos molestos sollozos.
-Quieres callarte y disfrutar -ordene- juro que te gustará.
Bajo mi mano hasta su entrepierna y comienzo a frotar encima de la tela el pequeño bulto que ya ha comenzado a formarse, su respiración se está volviendo irregular al igual que la mía. Poco a poco término de quitarle la ropa, sólo queda una pieza, la que yo tanto deseo arrojar pero la que él tanto teme perder. Ups ya la quite.
En cuestión de segundos baje mis jeans junto con mi boxer, ahora todo estaba listo. La carne estaba preparada y lista para comer y él comensal estaba más que preparado para gozar del exquisito sabor.
-Ya que no estamos preparados -acerqué tres de mis dedos a su boca, enseguida entendió lo que quería pero giró su cabeza con molestia-, bien, tu quieres que esto sea rudo.
Solté sus manos y coloque mi miembro en su entrada, tome sus caderas y entre de una estocada en él. Arqueo su espalda y la mueca de dolor puro en su rostro no podía ser más real, sus manos fueron directamente a mi espalda y enterró sus uñas en está.
Yo quería prepararlo pero él se rehusó.
-Esperaré un poco ¿De acuerdo? -esto sonará raro pero juro que él asintió-
Los minutos pasaron, sus uñas agilizaron su agarre, y su punzante entrada pedía algo.
Comencé con movimientos lentos pero certeros, sus brazos se aferraron a mi torso y su cabeza quedó a la perfecta altura de mi oído.
Esto se volvió algo excitante pero incómodo.
Subí la intensidad de las estocadas. Mi cuerpo chocaba contra el suyo haciendo un fuerte sonido, pequeñas gotas bajaban de mi frente, y la cereza del pastel. Sus gemidos.
Dios, no sabía que esos sonidos podían ponerme más duro de lo que ya estoy.
Tome su miembro firmemente y comencé a hacer movimientos de arriba a abajo. Sentí un cálido peso sobre mi mano, baje mi vista y su mano estaba deteniendo mis movimientos.
-N-No..lo..ah..frotes. -sus palabras apenas salían gracias a la irregularidad de su respiración-
-¿No te gusta? -pregunté a centímetros de su oído-
-H-Ha..ras que... -sentí un líquido espeso en mi mano. Él se corrió-
Una pequeña sonrisa apareció en mis labios.
Solté su miembro y tomé sus caderas al grado de dejar marcados mis dedos en ellas, comencé a dar fuertes estocadas, estaba a punto de...
Ya sucedió.
Me he corrido dentro de él.
Caí rendido en su pecho, mis cabellos se pegaron a mi frente y mi respiración seguía siendo irregular. Todo esto es normal, solo hay un problema..
¿Por qué de alguna manera esto me gusto?
Hak Yeon
Estoy consciente de lo que pasó.
Debería sentirme sucio y adolorido, muy adolorido porque esa bestia no tuvo cuidado alguno conmigo.
Siento la necesidad de tocar sus cabellos, de enredar mis dedos en ellos y de ver aún más su rostro, apuesto a que su piel debe ser muy cálida y suave.
Hak Yeon, solo... salgamos de aquí.
Un momento...
Ravi
Ravi. Él está esperándome.
Diablos, ¿ahora que voy a hacer? No podre verle de la misma manera que él lo hace. Con amor. No después de estar consiente de lo que hice.
-Won Sik va a odiarme. -pienso en voz alta y tapó mi cara con mis brazos-
-¿W-Won Sik? -pregunta él chico pálido que hace unos momentos descansaba en mi pecho. Ajá, no sabía que tengo novio-
El te matará por haberme hecho esto.
Literalmente estuviste de acuerdo y te recuerdo. Te gustó
No me eres de mucha ayuda en estos momentos.
-¿Kim Won Sik? -me sacudió un poco de los hombros, baje mis brazos y su rostro estaba a centímetros del mío-
Que bellos ojos y labios y nariz y... mejor concentrate.
Asentí con un poco de miedo.
-Diablos -se separó de mi- eres un idiota -¿Me lo está diciendo a mi?- nunca debiste haber puesto tus ojos en un chico como éste, -ahh. Está hablando solo, aunque, yo lo escucho- maldita sea, ¡él te odiara!, ¡nos odiara a los dos! —¿A los dos?—
-¿Conoces a Won Sik? -pregunté-
-ignoro mi pregunta- ¡Y tú! -me señaló con su dedo acusador- jamás vuelvas a meterte en asuntos que no te interesan niño.
Prometo hacerlo.
Acomodó su ropa y se fue sin decir más. Creo que después de todo, si conoce a Ravi.
❤❤❤
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Enamorandome De La Persona Equivocada |Editando|
RandomSer dejado por tu pareja y tener una decepción hacia el amor, no da como resultado algo bueno. El alcohol nunca es bueno si se usa para olvidar un dolor, ya que puede suceder la siguiente combinación: Hombre despechado + unas cuantas botellas de vod...