My heart is yours

Big,big surprise

El día ya era muy evidente gracias a los rayos de luz que mi ventana no podía contener, generalmente eso me molestaría mucho, pero no, hoy era un día muy especial: era mi cumpleaños y el de mi mejor amiga -lo se extraña casualidad-, cumplíamos 18 años y eso quería decir que porfin nos darían nuestro departamento.

Di un pequeño brinco de mi cama al baño, antes le di una mirada rápida a mi mejor amiga, la cual parecía que ni un temblor la despertaría, después de mi baño me encargaría de despertarla- lo se, se estarán preguntando que hace ella aquí, es una historia larga y resumiendola ella vive conmigo-; deje que el agua fría saliera antes de que me metiera bajo ella, después de un largo baño salí, me puse mi bata color azul pitufo y sí como lo suponía Lizette aun seguía dormida y por lo que veo tiene la fiel intensión de no despertar hasta dentro de mucho tiempo.

Tome lo primero que encontré en mi closet, me vestí y me dispuse a despertar a Lizette de la forma mas típica en mí: brinque sobre ella y la golpeé hasta que grito y se cayo de la cama.

-¡oh! lo siento pequeña no era mi intención tirarte-solté una pequeña risita- solo quería despertarte.

No quería reírme pero fue inevitable, ella solo me arremedo y entro al baño, acomode las camas, después de un largo rato salio ya vestida y con una cara menos dura.

-cumpleañera,-me acerque a Lizette y puse mi brazo sobre sus hombros-¿lista para bajar a desayunar?

-claro cumpleañera- quito mi brazo de sus hombros y me dio una mirada fulminante- aunque no creas que he olvidado lo de hace un rato.

Yo solo rodé los ojos y las dos comenzamos a reír, le di un abrazo y ella me lo correspondió; por eso es que ella es mi mejor amiga porque puedo molestarla mil veces y ella siempre estará ahí para mi.

Bajamos y la primera en saludarnos fue mi mamá.

-Mis niñas- se acercó a nosotras y dejo lo que traía en las manos sobre la mesa- ¡feliz cumpleaños!, ya son todas unas señoritas.

Ella estaba realmente conmovida al mirarnos y eso me produjo mucha ternura, no pude evitar lanzarme hacia ella y darle un abrazo, Lizette solo veía con ternura a mi mamá que parecía una fuente interminable de lagrimas, pero ya era de esperarse su pequeña cumplía 18.

-Bueno mujeres- mi papá se acercó hacia donde estábamos-,basta de tanto llorar y denme un abrazo a mi.

¡Pero si yo no estoy llorando!, mire a Lizette y al igual que mi mamá lloraba a mares, pero que les haría.

Fui la primera en abrazar a papá, el me dio mil vueltas en el aire y un sonoro beso en la mejilla, después Lizette se acercó a el para abrazarlo, fue menos efusivo pero igual de paternal y por ultimo mi mamá.

Fuimos a la cocina donde ya nos esperaba un rico desayuno al igual que un gran pastel, nos sentamos y mamá nos dio nuestros platos.

-Mamá, no se hubieran molestado- dije viendo toda la comida que estaba en la mesa-.

-Si señora, no era necesario- dijo mi amiga con una sonrisa en su rostro-.

-Claro que era necesario niñas- dijo tomando los platos que poco a poco se quedaban sin comida- no es cualquier día.

-Exacto, y mejor desayunen rápido para ver sus regalos- dijo mi papá terminando su último trago de cafe-.

-Bueno quería hacerles una pregunta- dijo mi amiga con un poco de pena- espero no les moleste.

-Claro que no linda- dijo mi mamá despeinándo un poco el cabello de mi amiga- pregunta lo que quieras ya eres de la familia.

-Bueno, mmm.... - ella parecía dudar de lo que diría, pero al final lo solto- ¿mis papás van a venir?

-Linda...- mi mamá miraba hacia todos lados, nerviosa, y con cierto dolor en sus ojos le dijo- lo siento, no podrán venir pero te mandan felicitaciones.

-¡Oh! gracias,- ella bajo la mirada hacia su plato y les dio una sonrisa a mis padres, que mas que sonrisa parecía una mueca- que lindos.

O no, mi amiga y su sonrisa fingida, la cual estaba llena de dolor, no dejare que nadie- y mucho menos sus papás- la hagan deprimirse.

-Liz, que te parece si abrimos ya los regalos- volteé a ver a mis papás y les lance un par de miradas- si no les va mal ¿verdad papis?

Ellos rápidamente captaron mi mirada y asintieron.

-Para nada- dijo mi mamá con una gran sonrisa- abran sus regalos ya.

Tome a Lizette de la mano y la lleve hasta la sala, donde había un par de regalos.

-Bueno, como tu naciste primero, solo un par de horas- le dije a mi amiga, dándole otro abrazo- seras la primera en abrir los regalos.

Ella tomo la primer caja, había ropa para las dos, aun quedaba una caja la cual nos diría la verdad sobre si tendríamos nuestro departamento.

Tome la caja con notorio nerviosismo, Lizette me tomo del hombro, eso me calmo un poco, rompí la envoltura de la pequeña caja, levante la tapa y...

-¡SI!- solté un gran grito- tenemos nuestro depa.

Tome a Lizette entre mis brazos y nos dimos un fuerte abrazo, luego las dos comenzamos a brincar. Comenzamos a hacer maletas, guardamos todo lo necesario ya que mañana iríamos a pasar la noche en nuestro nuevo departamento.