MANIQUÍ [CHANBAEK~BAEKYEOL]

Epílogo💕

                La Ventana Vacía.

—¿Ya viste a ese hombre?

La rubia miró a su amiga.

—¿Cuál?

—El hombre que está sentado en la mesa redonda.

—Es sexy.

—Lo sé, ¿apoco no? ¿Crees que debería ir a hablar con él?

La rubia miró con cautela.

—No veo ningún anillo de bodas.

ChanYeol era el hombre que se encontraba sentado en la mesa redonda, metiendo el tenedor en su pastel. Muchos ruidos circulaban a su alrededor; el cantante, los invitados bailando y riendo. Él se encontraba solo en la mesa hasta que una mujer muy joven se sentó frente a él.

—Hey, tú. —Sus labios brillantes llenos de gloss. Aparentaba unos veinte. ChanYeol le devolvió la sonrisa.

—Hola —respondió amablemente.

Ella se inclinó sobre la mesa y cogió un poco de merengue con un dedo cuidadoso, llevándolo a su boca.

—Soy Seulgi.

—ChanYeol —dijo el pelinegro.

—Encantada de conocerte. —Ella lo miró con sus ojos verdes revoloteando sobre su camisa de colores nítidos y chaqueta oscura—. ¿Dónde está tu esposa?

—No tengo una.

—¿Tu novia?

—Tampoco tengo una de esas.

—Oh —Seulgi sonrió como si supiera un secreto. Ella abrió su linda boquita, probablemente para preguntarle si quería bailar, pero un toque rápido en su hombro y ella rápidamente se calló.

—Te lo voy a robar por un minuto o dos —la novia le guiñó un ojo antes de extender una mano a su hermano. ChanYeol sonrió agradecido y puso su mano en la de ella, sintiendo un suave guante blanco en la suya.

—¿Dónde está el novio? —ChanYeol preguntó en voz baja. Realmente nunca le había gustado bailar, pero no podía decirle que no a Lia.

—Bailando con su madre —dijo ella—, o mi madre ahora, en realidad. Hum... ¿ChanYeol?

—¿Hum?

—A ti... te agrada Minhyun, ¿no es así?

—¿Eh? Claro, parece un buen chico.

—Pero ¿realmente te agrada? Quiero decir... nunca lo conociste —Lia se mordió el labio—. Sé que todo esto fue un poco brusco...

—La verdad sí me sorprendí un poco cuando me llamaste la semana pasada diciéndome, hola, me voy a casar, sería agradable si asistes a mi boda.

—Estoy muy contenta de que hayas llegado volando, sin embargo —Lia sonrió y puso su barbilla en su hombro—. Sé que estás muy ocupado. Significa mucho para mí.