Capítulo 6: Jungkook

52 0 4
                                    

(POV YOONGI)

-¡YA DEJALO EN PAZ!

Eso me dejo por algunos momentos en shock, la verdad que él llegara de repente, a "salvarme", me dejó muy sorprendido.

-O-oye amigo...no hay porque alterarse.-Decía ese puto bastardo el cual ponía sus manos en posición de defensa. Su falta de cojones era impresionante.

-Vayanse, ¡Ahora!.-Dijo el muy imponente chico. Los otros bastardos solo se fueron de la sala cabizbajos. El puto chico el cual me estaba tocando solo se alejó de mí y mirando al suelo como un cobarde se paró frente a aquel bello chico castaño.

-L-lo siento J-jungkook...-Jungkook...que bello nombre.

-Vete ya, bastardo.-Dijo Jungkook entre dientes.

-N-no volverá a ocurrir.-Y así fue como ese puto cobarde salió de la sala y terminé quedando solo con él... Con Jungkook.

Sentía su mirada clavada en mí. Yo sólo lo evitaba y miraba hacia al suelo sin poder dirigirle la mirada. Hasta que sentí un suspiro de su parte y se acercó a mí posando su mano en mi hombro izquierdo. Lo miré.

-¿Estás bien?.-Dijo tan dulce y tierno a comparación a como lo había visto hace poco. Me sonrió con unos lindos ojitos marrones y aquellos tiernos dientecitos.

-S-si...es-estoy bien.-Vaya...este chico me ponía muy nervioso.

-Soy Jeon Jungkook. Un gusto conocerte.-Jungkook...

-Y-yo soy M-min Yoongi.-Ah...puto nerviosismo, que vergüenza.

-No tienes porque estar nervioso YoonGi, yo no soy como ellos.-Fue interrumpido por el timbre de salida. Miró su celular y agregó.-¿Eh?, que raro...se supone que salimos a las 17:30 y son tan solo las 15:45.

-Estimados estudiantes. Hoy el horario de salida será pospuesto ya que ha habido un pequeño percance en la clase de Biología, sin más que agregar, me despido. El Director.

JungKook me miró sonriente y me sonrojé un poco, se acercó a la puerta de la sala y tomó su mochila. Volvió a mirarme y un poco confundido al ver que ni me había inmutado ante la noticia se acercó a mí.

-¿Qué esperas? Vamos, te acompaño a la salida.

-N-o, yo..., Mi madre debe venir a recogerme ya que mi casa se encuentra muy lejos de aquí y ahora ella se encuentra en el trabajo. No me queda más que esperar.

-Pero...¿Por qué no llamas a tu mamá y le dices que la esperas en mi casa? Así no te quedas solo acá. A ella no le gustaría que te quedaras solo en la escuela, es peligroso.

-Es-esta bien.

.
.
.

Iban sin decir palabra sobre el auto del castaño. Yoongi iba jugando con sus delicados dedos mirando con un notorio color rojizo en sus mejillas.

Jungkook decidió romper aquel incómodo silencio, y aún con su vista fijada en el camino. Antes de decir cualquier palabra, rió.

-Así que no pudiste hacer nada ¿eh? O te gustaba que ese guarro te tocara.

Dijo el castaño con un notorio tono de burla hacia el rubio. Él solo bufó por aquel comentario y respondió.

-Yo solo...no quería problemas, además, no era necesario que llegaras. Yo podía encargarme.

-Vaaaamos, sabes que no tenías oportunidad. Si yo no hubiera llegado dejarías de ser virgen.

Jungkook rió y Yoongi se comenzó a interrogar.

¿Tendrá razón? ¿Si el no hubiera llegado estaría prácticamente siendo violado? Y aún más importante...¿Como sabía que yo era virgen?

Miles de preguntas recorrían su cabeza. Pero decidió no tomarle importancia.

Jungkook paró ante una grande y linda casa la cuál estaba pintada con delicados colores neutros y decorada con un verde césped en el cual habían bellas rosas rojas.

Estacionó el auto frente a ésta y sacó las llaves mirando a Yoongi.

-Hemos llegado, ésta es mi casa.

-E-es muy linda

Linda como él. Como aquel chico que a Yoongi ponía tan nervioso. Él se bajó del auto y se dirigió a la puerta de su acompañante, éste con una sonrisa incómoda se bajó del auto y miraba hacia todos lados admirando las rojas rosas del jardín.

-¿Entras?.-Dijo el castaño, a lo que Yoongi asintió y entró.

Todo era muy prometedor. Lindos muebles, bellos floreros y hermosas alfombras. Él miraba embobado aquella desconocida casa a la que había accedido ir.

-Ven, sigueme.-Dijo Jungkook haciéndolo subir a el segundo piso de la casa. Allí se encontraba un pasillo el cual llevaba a dos puertas. Se dirigieron a la puerta en la que había un letrero el cual decía "No entres a menos que seas Bieber Oppa 7w7".

Esto le sacó una risilla a Yoongi y un leve sonrojo a Jungkook. Entraron y se encontró con una cama de cobertor y almohadas de un lindo color negro y unas sábanas de un delicado color blanco.

Jungkook se tiró sobre su cama arqueando su espalda y suspirando sensualmente. Esto hizo sentir a Yoongi unas ganas de morder aquel pálido cuello y perder su virginidad con aquel sexymente tierno chico. Pero sabía que eso no se haría posible

Sintió una vibración en su pantalón, le había llegado un mensaje, o no. Otra vez no.

×Mine×Yoonmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora