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Jordán

Fui directo a la cocina para así guardar los frascos y todos los alimentos. No estaba siendo fácil usar las drogas que tuve que comprar para controlar a Bautista pero prefería tenerlo un poco débil y cansado a que me golpeara o intentara escapar. Apenas si me sorprende que lo puedo cargar sin trabajos.

Exhausto me tire a mi cama, era hora de que durmiera un poco dejando por fin que mi cuerpo descanse.

°•°•°

Termine de cambiarle el pañal a Bautista, me alegraba que la droga hubiese funcionado tanto así que lo vestí rápidamente (foto de multimedia). Estaba tan emocionado que no pude evitar ponerle el chupete y las medias largas azules.

Por el contrario, se quito el chupete aventándolo del otro lado de la habitación para así cruzarse de brazos. Tal vez no me dolería si me golpeaba pero esos pequeños movimientos podían hacerme enojar.

- ¿Osea que me tapas el pañal con boxer pero no me pones pantalones? -se mofó- Vaya enfermo... -corrió el rostro-

Lo tome del mentón para que me viera- ¿Disculpa? ¿Por favor me lo puedes repetir? -solté con un tono sínico-

El miedo que sentía se reflejo en sus ojos, se puso ligeramente pálido e incluso soltó un pequeño gemidito de dolor pero él chico siguió intentando retarme.

- Si, claro -sonrió sínico- Eres un enfermo, simplemente enfermo... Prefiero no usar nada ha solo ponerme un estúpido bóxer -solto retandome-

- Que así sea... -solté quitándole el bóxer para después cargarlo de las axilas y bajarlo- Sabes... Iba a ponerte pantalones pero parece que mi bebito tenía mucho que decir hoy -lo senté en una carreola que, impresionantemente,era del tamaño del mayor- Que lindo que iremos de paseo, ¿¡no!? -solté emocionado-

Lo vi sorprenderse y ponerse algo pálido, ahí me di cuenta que él cayo en la realidad de que lo iba a sacar y a exponerlo en publico. Eso me hizo sonreír con malicia mientras terminaba de abrocharlo en la carriola.

Bautista

Sentía que me iba a morir, la verdad que no podía creer lo que me quería hacer... Sonara loco pero prefiero que me azote hasta que sangre o me diera con el cinturón, todo menos esto.

- ¿¡Qué!? ¡No, no, no! -grite intentando soltarme, aunque sea con movimientos no tan bruscos como imaginaba- A-Azotame si quieres pero no me saques así -rogué mirándolo completamente asustado-

Negó con su cabeza y tomo algo de la mesa, se acerco y me coloco un chupete de color gris que abrocho desde mi playera, algo para no perderlo... Por el miedo no lo escupí de inmediato.

- Ahora vamos, el parque te encantará -sonrió y abrió la puerta para salir conmigo sin olvidar llevarse una pañalera demasiado infantil-

Me asuste, a tal grado que me orine del miedo. Igualmente eso me sorprendió, no pensé orinar tan fácil pero... Dios, esto me ponía la piel de de gallina en muchos aspectos. Supuse que por el hecho de que ya no podía aguantar más había pasado.

Pensé en algo, sabia que seria humillante pero era mejor un poco de dignidad a quedarse con el orgullo. Aunque claro, mi orgullo era muy grande... Así pues escupí el chupete y cerré mis ojos con demasiados nervios.

- Po-por favor, no me saques así... Te lo ru-ruego Papi... -solté no muy alto-

- ¿Huh? -paro y se paso hasta enfrente de carreola para ponerse frente mío- ¿Me estas rogando? -se cruzo de brazos-

Asentí frenético mientras lo miraba completamente desesperado. Me estaba sacudiendo un poco para poder salir de la carreola pero si seguía así entonces no podría conseguir lo que quería.

- Bueno... Si no salimos... ¿Qué haremos en casita? -me miro sonriendo tranquilo-

- Uh... Cu-cualquier otra cosa que n-no sea salir... -Sonreí con nervios-

Río y giro la carreola para entrar de nuevo a casa- Bien pero no te salvas de que salgamos otro día -entramos a casa-

Suspire aliviado, una pequeña sonrisa apareció en mi rostro mientras dejaba que mi cuerpo se recostada en el respaldo de la carreola muchísimo más relajado.

°•°•°

Sentado en el suelo de un corralito, esperaba a que Jordán saliera de donde sea que se haya metido. Me había dejado la televisión encendida con el netflix puesto, me dejo el control a la mano pero no podía salirme de la sección de niños. Suspirando frustrado, presione cualquier película para así dejar que la televisión hablara sola.

Hoy seria mi oportunidad, el corralito no estaba tan bien asegurado y había visto como lo abría y cerraba. Así que me pare con cuidado y estire mi brazo para poder abrir la puerta, cuando lo logre salí del corral.

No entendía porque pero mis piernas temblaban, me hinque un momento para poder respirar y calmarme para concentrarme. Mi objetivo era llegar a la puerta, abrirla a como diera lugar y huir antes de que ese maniático me escuchara. Me levante y camine a la puerta rápidamente, tome el picaporte y gire con cuidado. Fruncí el ceño al ver que estaba cerrado, trate de forcejear pero no era posible abrirla.

Molesto, le di una patada a la puerta y me gire. No tenia intenciones de volver al corral pero escuche los pasos de Jordán así que no me quedo de otra que ir y volverme a encerrar ahí y pretender que le prestaba atención un poco a la televisión.

- Ay dios... -abrió la puerta y después la cerro de nuevo con llave- Que raro... Hey, ¿qué estas viendo? -se acerco al corral-

Después de verlo llegar, volví a ver directo a la tele. Me sorprendí un poco al ver la película, tenia años que no veía ¨Madagascar¨... En realidad, era mi película favorita de niño.

- Je... Me gusta esa película -sonrió para así abrir el corral y sentarse a mi lado-

Lo mire sin entender, él me abrazo y apego a su pecho para que viéramos la película juntos pero... Yo no comprendía porqué y no es que me molestara su cercanía pero era algo que no podía entender de este chico. A veces firme y serio pero siempre siendo amable y tierno...

- ¿Qué, ahora serás un bebé? -solté mirándole con una sonrisa traviesa-

- No, solo quiero estar cómodo contigo Bauti~ -me abrazo con fuerza-

Sentí que me sonrojaba, no entendía porque pero no forceje con él esta vez y lo deje abrazarme dejando que la película siguiera su curso. No se cuando pero comencé a sentirme algo adormilado, hasta que me quede completamente dormido en sus brazos.

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Primer intento fallido, ¿habra más? Tengan seguro de que si...

Nos leemos pronto~

Lección Merecida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora