Gemelos [BNHA] En Hiatus

Capitulo 13

Años habían pasado sobre ese incidente, de la desaparición de Himiko y su familia.

Aunque tal vez esa no sea la palabra correcta, después de todo pudieron haberse mudado. Entendía muy bien el porque de ello.

Y aunque quisiera negarlo se sintió dolido cuando eso pasó, este sería el sentimiento de traición, ¿Tal vez?

Suspiro y dejó caer su cabeza en el pupitre, estirando sus manos por ella y negando.

Ese sentimiento no tenía que hacer allí... Pero al fin y al cabo, los sentimientos son extraños e incomprensibles.

Genial, ahora parecía que estaba en una clase de filosofía o psicología.

- Kou – Llamo alguien a su lado con un tono seco – El tutor encargado me dijo que fueras al salon de maestros.

- Gracias por decírmelo, Dabi – Sonrió. Se levantó para agarrar su maletín y comenzar a caminar.

- Es algo estúpido decirte esto pero no te confíes, esos desgraciados son bastante astutos.

- Lo se – Movió un poco su cabeza hacia tras y lo miro de reojo – ¡Oh! Me olvidaba decirte pero las galletas que compraste estaban deliciosas.

- Tu... – Había escondido esas galletas para que el otro no las encontrará pero al parecer fracaso, como siempre – ¡Devuélveme mi dinero!

- No~ – Negó en un puchero y comenzó a correr – ¡Pero puedes quedarte con mis bolas de arroz!

Dabi solo pudo suspirar y mirar la puerta por donde se había ido aquel chico.

-... Eso no compensa las galletas por las que pase media hora esperando.

Por otro lado, Kou estaba corriendo. Dabi no lo perseguiría por la simple razón de que sería demasiado llamativo y el odiaba eso.

Aún sabiendo eso, no paro su ritmo hasta llegar frente a la puerta del salón donde lo esperaría su maestro.

Fijándose de no tener ningún defecto, tocó la puerta y al escuchar el pase, se adentro en el cuarto cerrando la puerta detrás de él.

Avanzó de manera un poco lenta y puso en alerta todos sus sentidos. La razón por la que su amigo le había advertido tenía una razón y esa era...

- Midoriya-kun, veo que has venido algo tarde – Siguio sonriendo con esa sonrisa tan falda que a Kou, sin lugar a dudas, detestaba.

- Lo siento mucho profesor – Sonrió como de costumbre e hizo una referencia para después pararse normal – Pero no es como si pudiera llegar de inmediato teniendo en cuenta la distancia entre el salón de clases y este cuarto, ¿No?

En todo el lugar se podía sentir la incomodidad del mayor al sentir la mirada fría y monótona de su alumno pero sin dejar de sonreír.

- Tranquilo, comprendo la situación – Río algo divertido pero de manera hueca – La razón por la que te llame es porque tu examen esta desaprobado – Le extendió un papel y ahora se podía ver cómo los labios de la comisura de su boca se levantaban, con burla.

Kou solo lo pudo ver sin quitar esa sonrisa pero parecía la de un robot. Ya se esperaba este tipo de cosas.

- Es una lastima lo de mi nota – Fingió desanimarse – Mamá tenda que venir, hablar con el director y mostrarle el examen.

- ¿E-Eh? No hace falta eso, joven – Hablo nervioso, si ese hombre venía sin dudas sería despedido por tal fallo – Te perdonaré por esta vez, solo intenta esforzarte más, ¿De acuerdo?

- Si, profesor.

«Claro que no»

Si pensaste que era tan ingenuo como para no darme cuenta de que claramente este era un examen de temas que se verían recién un años después... Sin dudas, el único ingenuo eres tú.

Al día siguiente y con completa calma me dirigí al despacho del director con mi madre diciendo que el director quería verla por mi nota tan baja en ese examen.

Al mirar las preguntas, su rostro no tenía precio. De inmediato llamo a mi profesor y le pidió explicaciones.

Al final, ese hombre fue despedido.

Mamá no se quejó. Le pareció severo su castigo pero tampoco dijo nada, probablemente sabía que en algunas ocaciones no podía hacer nada, como en este caso. Sin importar lo que dijera, sería despedido.

•••

Por si se lo preguntan, Kou se terminó mudando de escuela por lo que Izuku va a una diferente.

De todas formas, lo aclararé capítulos después.