parte tres

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había pasado una semana ya del incidente en The Groove. no le había contado a ninguna de las chicas sobre el encuentro, porque todas ellas se quejaban de que aún no tenían a nadie en mente, y que cada vez que lo intentaban, habían guardaespaldas de por medio. en cambio yo, había estado en contacto toda la semana con Ashton y Michael, pero, el rubio de ojos claros nunca me habló, ni siquiera se dignó a seguirme en instagram. sinceramente, no me podría importar menos.
llevaba más de media hora arreglándome en mi habitación para salir al mismo bar de siempre junto a Ashton, Michael y un par de amigos de ellos cuando suena mi teléfono, lo tomé para ver quién llamaba y solo obtuve un número desconocido de respuesta. decidí contestar y no pude evitar sorprenderme al oír la ronca voz de Luke del otro lado de la línea "hey nena, Ashton me dio tu número" lo oí murmurar, parecía como si recién hubiera despertado de una larga siesta. no respondí nada y él simplemente, siguió hablando "te veré hoy ¿huh?" me apoyé sobre el pequeño escritorio que tenía como función ser un tocador y me digné a responder "pues si, pero no te emociones tanto, que voy por los demás, cariño" "ya veremos, linda" fue la única respuesta que recibí antes de que él cortara el teléfono. me ponía de nervios.
ya lista, salí y tomé un taxi hasta el famoso lugar donde había conocido a five minutes of spring una semana atrás. estaba algo nerviosa. no sabía que insinuaba Luke y por un lado, prefería quedarme sin saber. pero al llegar, todos ya estaban sentados en la mesa, incluidos Luke, y Calum, con una rubia sentada sobre sus piernas, a este las mujeres le llueven. al llegar a la mesa los saludé a todos, y por último a Luke, quién tenía un puesto desocupado a su lado, en el cual me senté rápidamente para no quedarme sin lugar en la mesa. "soy Calum, un placer" el moreno me sonrió y yo repetí la acción "Brooklyn".
ya llevábamos más de una hora conversando y el alcohol fluía por mi cuerpo debido a la gran cantidad de shots de tequila que había bebido junto a Ashton y Luke, uno tras otro sin parar, hasta quedar todos mareados y hablando tonterías.
"¿bailamos?" "¿huh?" "que si bailamos Brooklyn" "aaaah. bueno" me encogí de hombros y por segunda vez, me dirigí hacia la pista de baile, completamente llena, junto al rubio de dos metros. esta vez no conseguiría lo que quería. ya bailando, con nuestros cuerpos pegados y él tomando mis caderas con fuerza, pude preguntarle "¿por qué no me hablaste hasta hoy?" "cariño, ¿te parece que yo sea de los que llaman luego de pedir el número?" su respuesta  arrogante y superior me hizo rodar los ojos con extrema exageración "la verdad es que si, Hemmings. que tengas tu bandita exitosa no singifica que seas el hombre más bello del universo" ni el más inteligente. me tragué eso último en espera de su respuesta. él sólo se encogió de hombros y me dio una vuelta, lo que me hizo quedar de espaldas a él. podía sentir su miembro contra mi trasero y eso de alguna forma, me motivó más a continuar bailando pegada a su cuerpo, hasta que ambos ya estábamos sudando. al finalizar la canción pude sentir la presión de sus manos sobre mis caderas soltarse un poco, yo me volteé hacia el rubio y al hacerlo, volvió a tomarme de la cintura con ambas manos, como si no quisiera dejarme ir. "¿que pasa, rubio oxigenado" reí ante mi propio comentario, no debí haber bebido tanto, de nuevo "¿qué pasa contigo, plástica?" lo miré entrecerrando mis ojos, a lo que él simplemente, alzó ambas cejas "son reales" sentí su mirada sobre mis pechos y los cubrí rápidamente con ambas manos "pervertido!" lo empujé suavemente, volviendo a reír como estúpida junto a él, que solo respondió, luego de calmarse "maldita calienta sopas" "y orgullosa, Luke Hemmings."

esta vez, a la mañana siguiente, tenía un mensaje del rubio. no era algo que esperaba de él, y menos tan luego, pero ahí estaba; un simple "hey" era todo lo que había texteado. pero algo es algo y decidí responderle lo mismo, no más ni menos. orgullosa de mi respuesta, me levanté de la cama, con un horrible dolor de cabeza, e intenté ordenar las ideas en mi cabeza. tenía montones de lagunas mentales de la noche anterior, pero lo que más recordaba era cuando Michael me había traído a casa y me había hablado todo el camino de que el rubio solo la usaría para nada más que una noche y bla bla, típico cuento. pobre chico, no sabe que para mi, el chico alto de ojos azules no es más que una simple apuesta y ochocientos dólares que gastar en cualquier tontería que se me venga a la mente.

una vez levantada, decidí ir a tomar desayuno junto a Chloe y Abi, dos de mis compañeras de departamento que se encontraban tomando café en la mesa de la cocina cuando entré yo. "wow, te ves como la mierda Brooke" qué lindas son, ¿no? "shhh, lo sé bebé, no tienes que recordármelo todos los días" le sonreí a la pelirroja. Abi había sido una gran amiga desde siempre, y así nos tratábamos, nada nuevo. ya con mi café listo, me senté frente a ambas chicas y nos dedicamos a hablar de la noche anterior; en la que cada una había ido a un lugar distinto, yo, obviamente, no les dije nada sobre Luke Hemmings y simplemente les conté que había pasado una gran noche junto a unos amigos de la univerisdad. todavía tenía ventaja en este juego, y no le iba a dar la victoria tan rápido al fuckboy rubio que me esperaba todos los viernes en el famoso club. no tan rápido.

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⏰ Última actualización: Jul 02, 2018 ⏰

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