me acuesto en la cama
me relajo y duermo
pero una parte de mi no está dormida
mi alma
ella sale de mi
se sienta a un costado
me observa fijamente, me sonríe, pasa su mano por mi rostro y me acaricia, pero no puedo sentir su tacto.
después
se levanta y camina por la casa
mi cuerpo, mientras tanto, está paralizado pero al tanto de todo lo que sucede al rededor
observo que se dirige a la habitación de mis papás
traspasa la muerta, y hace lo mismo que hizo conmigo, pero con la diferencia que besa sus mejillas,
mi mamá, frunce el ceño y de sus labios con un dejo de tristeza, sale mi nombre en un susurro,
mi alma la observa un momento más y vuelve a mi habitación
mira a mis hermanas y les propicia caricias en sus cabezas
al cabo de un rato, vuelve a mirarme y niega con la cabeza.
una lagrima se desliza por sus mejillas, y la impotencia que me invade por no comprender lo que está pasando es enorme.
sin embargo, al fin lo comprendo cuando en sólo segundos mi mamá entra a la habitación con su rostro bañado en lagrimas y gritando mi nombre
mueve mi cuerpo pero no logro abrir los ojos, o siquiera mover una parte de mi cuerpo
ella llora y yo también lo hago,
pero al fin lo comprendo todo
y puedo continuar con mi sueño eterno.