Siempre que me imagino a mi, lo hago viéndome caminar por una playa desierta,en cada paso que doy siento la caliente arena pasar entre las plantas de mis pies, en un momento determinado me siento a las orillas del mar, al hacerlo mi vista se dirige hacia el cielo y noto lo increíble que está el día, los rayos del sol golpean mi rostro con suavidad al igual que el tibio aire , yo lo disfruto, todo es calma, pero la calma es efímera porque el cielo se nubla, se torna completamente negro, lo cual me parece bastante extraño, pero continuo ahí,ahora mi vista se enfoca en el mar, en el veo que en lo profundo se empiezan a formar olas enormes y vienen hacia mi con violencia , pero al llegar a la mitad se deshacen y su llegada es lenta pero arrasadora , el agua toca mi cuerpo lentamente y se desplaza nuevamente a lo profundo , con ella arrastra una parte de mi , la ola que me golpea lentamente con el objetivo de que yo no noté su azote , siempre se lleva algo en cada pequeño arrastre. Al principio se llevó la seguridad en mi misma , lo hizo de a poco , con tranquilidad y paciencia , sabiendo que yo no podía hacer nada para retenerla , siempre es así , la ola golpea contra mi y luego se marcha, y yo continuo ahí sentada sin hacer nada en lo absoluto para impedírselo , muchas veces traté de prohibirselo pero me fue imposible , no puedo luchar con ella , entonces lo único que me queda es sentarme ahí y esperar , esperar a que tenga piedad de mi y deje de arrastrar mi esencia , yo sólo espero a que cada ola que venga hacia mi tenga piedad , pero sólo es un deseo que pasa fugazmente por mi mente, porque sé que ninguna ola tendrá piedad de mi , no les importo , ellas sólo quiero tomar algo y marcharse, así es continuamente .